Libertad elegir

LA LIBERTAD DE ELEGIR. HACIA UN NUEVO LIBERALISMO ECONÓMICO

FRIEDMAN, MILTON

El trabajo realizado por Friedman es un aporte crucial al entendimiento de la economía capitalista estructurada en el libre mercado.

Se trata de una lectura amena por su claridad y de fácil deducción de la ideas que expone el autor, haciendo que el lector reconsidere y fortalezca el lenguaje que se ha desarrollado en torno al mercado.

La idea principal es que la libertad del mercado es la fuente fundamental de las demás libertades (política, social, cultural). En ese sentido, el mercado no solamente es el mejor asignado de los recursos sino que también es el que mejor salvaguarda la libertad individual.

El trabajo aporta una mirada importante sobre los elementos de los cuales el hombre retroalimenta su libertad, a saber, los precios, las instituciones, la voluntad y las capacidades. Sobre ello lo que se puede deducir es que, en el caso de presentarse cierta restricción de alguna de ellas, necesariamente la libertad general del hombre se verá lesionada y se enrarecerá la atmósfera económica, política, social y cultural.

Friedman trabaja con tres conceptos: intercambio voluntario, los precios como forma de guiar la libertad de elección, y la identificación precisa de las funciones del Estado. Estos tres conceptos se encuentran encerrados en la eficiencia que tiene el mercado para ordenar a los individuos, de tal forma, que por ejemplo, si se quisiera desarrollar una estructura de organización jerárquica, para el autor esto no es una posibilidad puesto que es imposible controlar a cada uno de los individuos que en ella actúan y, además, se generarían costos elevadísimos.

Para desarrollar la voluntad de negociar, Friedman se apoya en Smith, al referir la máxima descubierta por este último en la que se manifiesta claramente que en todo intercambio voluntario genera beneficios para quienes participan en él. Siendo así, no existe peligro de que alguna de las partes no obtenga lo que merece. Esto hace, a su vez, que cada quien busque la mejor posición dentro de la estructura económica.

En su concepto de los precios como forma de guiar la libertad de elección, Friedman da a los precios una importancia crucial a través de tres funciones: como medio de información, como estímulo para adoptar los métodos de producción menos costosos y como determinante de la distribución de la renta. Lo anterior significa que cualquier distorsión en los precios no reflejará la verdad de lo que acontece en la industria, por lo tanto la información sería defectuosa y se incurriría en un desestimulo para los métodos de producción y para el aumento de salarios. La distribución de la renta podría quedar en las personas que han distorsionado la información.

Con respecto a la identificación precisa de las funciones del Estado, se puede identificar a éste como el poder más próximo para entorpecer la libertad individual, dado que se puede apropiar de funciones que no representan ningún beneficio. Además, considera que el Estado puede ser fácilmente corrompido por las múltiples posiciones políticas y los diferentes esas funciones intereses que éstas manejan.

Para definir, específicas, Friedman retoma lo establecido por Smith quien contempló tres obligaciones del Estado:

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