PALABRAS DE DESPEDIDA: MARÍA GUADALUPE PALACIOS CRUZ

PALABRAS DE DESPEDIDA: MARÍA GUADALUPE PALACIOS CRUZ

Buen día, C.  Mtro. Javier Irepan Hacha, director del Instituto Michoacano de Ciencias de la Educación José María Morelos, distinguidas personalidades que nos honran con su presencia en la mesa del presídium, padres de familia, compañeros que hoy egresan y demás público que me escucha. Es un honor para mí hacer uso de la palabra y darles la más cordial de las bienvenidas a esta ceremonia de Entrega de Cartas de Pasante a los alumnos que orgullosamente egresamos del Instituto Michoacano de Ciencias de la Educación, a nombre de todos mis compañeros, sean bienvenidos.

Hoy este acto marca el fin de uno de los caminos más importantes que hemos tenido la mayoría, y en este final compartimos todos una alegría, una alegría por haber conseguido una meta personal que nos propusimos hace 4 años. Hace un tiempo entrabamos a nuestra institución, algunos sin saber realmente si esta era la carrera apropiada para nosotros. Miro hacia atrás, no estoy segura de sí es más fácil decir adiós y salir o simplemente decir adiós y que la gente te deje. Durante todos estos años hemos acumulado experiencias, momentos, recuerdos en cada lugar de nuestra escuela, en las clases, en alguna de las aulas, en los pasillos, en la cafetería, la biblioteca o en una de sus múltiples escalinatas, y cierto es que todos ellos nos ha marcado y nos acompañaran para siempre.

Por su puesto no me quiero olvidar en este acto, de aquellas personas que nos han ayudado tanto en este difícil camino, primero que nada al Mtro. Javier Irepan, a usted que nos enseñó que cada persona en nuestra escuela puede ser un líder. Nunca nos lo dijo, sin embargo no tuvo que hacerlo, lo demostró en sus acciones todos los días, la pared de amabilidad y la exhibición que tenia para mostrar las cosas que usted hizo alrededor de la escuela no solo inspiraron a sus pares, también lo hizo a su personal.

A cada uno de nuestros asesores, que nos enseñaron a estar dispuestos a correr riesgos y a no utilizar recompensas como una forma de atraer a los estudiantes, pero tratando de hacerlo solo por los beneficios del aprendizaje. Es posible que cada enseñanza no haya funcionado tal y como nos la plantearon, pero intentarlo y no lograr un éxito total, es mejor que no intentar nada. Usted querido asesor, me enseño que una palmada en la espalda es siempre mejor que una bofetada en la muñeca. Gracias por ser modelos de bondad y cariño, es por eso que haN funcionado desenfrenadamente dentro de nuestra escuela.

Estas lecciones que me han enseñado a ser líder, estar dispuesta a correr riesgos, ser amable y ser yo misma, son elecciones que seguiré haciendo lo mejor posible para aplicarlas en mi propia vida como docente.

También quiero agradecer a las personas más importantes en nuestras vidas,  personas que han contribuido a que esta etapa haya sido mucho más fácil y que nos han apoyado en aquel momento difícil cuando lo veíamos todo negro y nos dieron un empujón cuando más lo necesitábamos, con estas personas me refiero a nuestras familias, que en cada caso serán o bien sus padres, hermanos, abuelos, tíos, primos, en fin, simplemente les damos las más sinceras gracias por su apoyo y su confianza.

Como olvidar a nuestros amigos, tanto a los que teníamos antes de llegar aquí, como los que conocimos en el transcurso de nuestra carrera, que eran los que  nos ayudaban y apoyaban cuando no sabíamos ni por dónde empezar, los que nos animaban cuando fallábamos en algo, los que nos aconsejaron y pedían consejos en cualquier momento de crisis, o bueno también decirlo, con los que nos fuimos de fiesta o con los que hicimos un viaje difícil de olvidar, solo recordemos “Es muy difícil encontrar un buen amigo, más difícil todavía dejarlo pero imposible olvidarlo”.

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