Reseña literaria por bodas de oro

LOS 50 DE MI COLEGIO

50 años formando éxito, 50 años de buenos cambios. Bajas y altas que muy has sabido aprovechar. Enseñando ya a 4 generaciones, que ahora gracias a tus saberes, orgullosos están de lo que al país han contribuido y contribuirán.

En tus aulas se han escrito historias y la mía estará allí también. Años que los jóvenes han formado sus bases para esta vida que tan difícil se ha vuelta, pues con la calidad de docentes que tienes, afrontarán todos, sin problemas.

Antes de ingresar a estas aulas, pensaba yo que eras como otros colegios, con sus muy evidentes defectos en sus alumnos disciplina y demás. Y hasta tenía miedo pues era una pequeña que de diversión responsable no entendía. Pero ahora, con años compartiendo vivencias, tristes, alegres, locas divertidas, peligrosas y demás, me di cuenta que eres más que honor y disciplina, lemas que muy en alto llevas, si no también eres el lugar que cambia y une vidas, como a mí me pasó. Jamás olvidaré lo que en aquellos salones viví, hice y deshice pues de eso se trata, la etapa más bonita para mí es esta.

Lo bueno nunca se olvida, y de eso tratan tus 50 años, nada en tu historia quedará olvidada, son historias valiosas de esfuerzo y emprendimiento en donde muchos, con un granito de arena han hecho bastante. Pues yo tranquila no voy a estar hasta contribuir un poco en tu infinita transformación.

El colegio es el espacio donde no sólo se aplican e imparten conocimientos. Es una fuente de cuyas gotas, fluyen amistad afecto, amor y confianza. Donde tanto los alumnos como los docentes vivenciamos experiencias.

Algunos te consideran el segundo nido, o el segundo hogar. Pero para mí, tu eres y será el camino que abrirá las puertas de la vida, y me permitirás forjarme como una persona de vienen la sociedad a la que pertenezco. No me importa si las matemáticas me resultan difíciles. Sé que tuve en las asignaturas las herramientas necesarias para construir mi futuro y la personalidad que definida gracias a ti y las personas que conocí pude definirla.

Indudablemente llegar a los 50 años es llegar a la madurez, reconocimiento solidez y experiencia, algo que muy fácil se cumplen como los años, pero llevar a cabo estas virtudes con la misma solidez que en tus inicios no es tan fácil, lo reconozco y por ello muy orgullosa me siento de ti y todas las piezas que te ha formado y que ahora responsablemente te conforman y te hacen crecer.

Todas las fiestas que en tu honor se hacen, es porque estas generaciones te agradecen tantas buenas anécdotas, tantos momento felices y tristes también.

Yo agradezco a todos mis maestros que en estos años me han formado, pues a muchos de ellos otros docentes en estas mismas aulas de igual forma los llenaron de sus conocimientos,

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