Soberania Del Estado

INTRODUCCION

En el siguiente trabajo planteado nos dedicaremos exclusivamente a dar un matiz, una estructura, una conceptualización clara sobre un tema tan riguroso y apasionante como de seguro lo es, me refiero al “ESTADO SOBERANO” a la luz de la estructura y funcionamiento de aquella forma política que desde la edad moderna ha llegado hasta nuestros días, se ve que, en primer término, la soberanía da muestra a la existencia de otros poderes sociales jerárquicamente organizados ya sea público o privado de estos en referencia, el Estado es el supremo e inapelable. Así, una sociedad anónima tiene como órgano superior la asamblea general de accionistas, una universidad, la junta de gobierno con todas sus formas de existir, un partido político, el comité ejecutivo nacional. Pero todos estos órganos en última instancia, están subordinados al Estado a su constitución y sus leyes, a sus ordenamientos, a sus disposiciones y decretos. En cambio, el poder del Estado no tiene a ningún otro sobre él o por encima de él. Por eso se le llama SOBERANO (de summa potestas). No es un simple poder superior con respecto a otros poderes inferiores, sino que en la escala jerárquica ocupa el puesto más alto. Hay una relación de supraordenación frente a la cual todos los demás poderes aparecen como subordinados a él.

Esto no quiere decir que se trate, claro está, de un poder absoluto, omnímodo, puesto que está limitado por la norma básica del bien público y las disposiciones positivas que de ella se derivan.

Y sobre todo Como bien afirma Marcial Rubio , será un Estado soberano porque tiene organización basada en autoridades todas emergentes de la sociedad, sin privilegio alguno de carácter monárquico, guiado por los principios; y será democrático porque la manera de asignar el poder es la de decisión del pueblo a través de elecciones periódicas y con posibilidad de participación mediante procedimientos de democracia directa.

Es así como se caracteriza el poder del Estado con todas sus ventajas y quizá desventajas que podrían llegar a existir.

SOBERANIA DEL ESTADO

ANTESEDENTES

La noción de soberanía es de capital importancia en la teoría política. No se trata de una noción elaborada modernamente por los juristas, aunque ciertamente su delimitación y precisiones se deban en gran parte a ellos. Como dice muy bien el clásico tratadista de Teoría General del Estado.

Georg Jellinek: “La soberanía es, en su origen histórico, una concepción de índole política, que solo más tarde se ha condensado en una de índole jurídica. No se ha descubierto este concepto en el gabinete de sabios extraños al mundo, sino que debe su existencia a fuerzas muy poderosas, cuyas luchas forman el contenido de siglos enteros”.

“En razón a lo mencionado se hace referencia básicamente que la soberanía del estado aparece como una concepción política mas no como una jurídica pero lo que es necesario entender es, si ahora funciona como un tanto político o jurídico creo a mi entender que eso no es un tanto esencial saber ahora, puesto que su existencia es compleja y podría resultar paradójico”.

La soberanía, tal como lo hemos caracterizado en el párrafo anterior, fue ciertamente desconocida por los antiguos. No solamente en el antiguo Oriente, sino también en Grecia y en Roma se ignoró la idea de un poder que, con respecto a otros de índole semejante, ocupase un lugar supremo. Para ellos no había más que un solo poder que englobaba a todos los demás y con respecto al cual no se podía hacer comparaciones. Los griegos conocieron el concepto y la organización de la comunidad autosuficiente (koinonia autarjes) como ideal supremo de la vida política, pero no el de una autoridad soberana.

Lo antedicho también supone que SOBERANIA es y se verifica como autarjía ósea autogobierno, esto no vendría a ser una concepción ideal ya que un autogobierno no podría existir por las mismas barreras que el estado garantiza.

Se necesitó que con el advenimiento del cristianismo surgiera en la vida social un nuevo poder, el de la iglesia, para que así el poder del estado tuviera una antagonista y pudiera establecerse una comparación entre los dos. Y se planteara una controversia acerca de la supremacía. ¿Cuál de los dos era superior? ¿Cuál debería quedar subordinado al otro? Este fue el tema de grandes polémicas doctrinales que llenaron la edad media, desde el siglo XI hasta mediados del XV. Por eso ha dicho Jellinek, con toda razón, que el concepto de soberanía es histórico y polémico. No es una elaboración de gabinete sino el fruto de luchas políticas y doctrinales muy intensas.

Ya bien entrada la edad moderna, y bajo el signo del absolutismo de los reyes de Francia, que habían salido vencedores en las controversias contra el Papa y el emperador del Sacreo Imperio Romano Germánico (la más célebre de las cuales fue la del rey Felipe el Hermoso contra el Papa Bonifacio VIII), recibió la noción de soberanía su mejor caracterización conceptual. El encargado de dársela fue un riguroso jurista, heredero de las tradiciones y de la disciplina de los legistas que habían estado al servicio del poder Francés, Jean Bodino (1530-1596), en su obra Les six livres de la republique (aparecida en el lengua francesa en 1576).y traducida después al latín, por el propio Bodino, con el título “de república libri sex”. Deseoso de fortalecer el poder absoluto del rey de Francia debilitado por las largas y cruentas guerras de religión. Bodino elaboro un tratado muy completo de derecho político en el que quedaron claramente delimitadas las nociones de Estado y de soberanía.

Republique dice, empleando este término como sinónimo de Estado.

“la republica es un gobierno recto de varias familias y de lo que le es común, con potestad soberana” .

Aquí aparece ya el término soberano. ¿Qué significado le da Bodino? Ante todo, el de una característica esencial del Estado, puesto que sin ella no existe, (La republica sin potestad soberana que una todos los miembros y partes de la misma y todas las familias y colegios en un cuerpo, ya no es república, la soberanía es la potestad absoluta y perpetua de una república).

Esta definición francesa es bastante clara y precisa. Sin embargo, se iluminan aún más si se les compara con las latinas que da el propio Bodino.

“la republica es la multitud de familias y de lo que le es común gobernada con potestad suprema y por la razón”.

Aquí parece un significado de soberanía con más precisión donde señala que es una potestad suprema. Y todavía se ve con mayor exactitud en la definición que da, de la soberanía que es clásico en la teoría del Estado, dices:

“la soberanía es la potestad suprema sobre ciudadanos y súbditos, no sometida a ley”.

Se hace hincapié, de nuevo, en la característica fundamental se la soberanía: es una potestad suprema. De aquí se derivan sus propiedades específicas: la soberanía es un poder legalmente supremo y perpetuo. Es, además, indivisible, imprescriptible e inalienable.

 A manera de conclusión se podría apreciar que todo lo expuesto es subjetivo por que la concepción que hace BODIN sobre el Estado como titular de la soberanía es muy vaga e imperfecta pero que nos da luces de lo que podría significar la soberanía en un sentido estricto, digo vaga e imperfecta por que la apreciación que hace con referencia a la soberanía va encaminada a robustecer el gobierno monárquico francés y no a dar una verdadera razón de ser de la soberanía pues el estado no solo funciona con un tipo de gobierno sino con una infinidad de estos.

UNA APROXIMACIÓN MÁS RIGUROSA

Una de las más importantes aproximaciones sobre la soberanía, es la que se observa con Tomás Hobbes, (1588 – 1679) en su obra Leviathan.

Encontramos una construcción rigurosamente lógica de la noción de soberanía. Preocupado por las desgracias que traía consigo las cruentas guerras civiles con su anarquía y destrucción, Hobbes estaba convencido que “solo una mano fuerte podría reconstruir la ley y el orden y traendo consigo la paz” es así que Hobbes, se dedica enteramente a trazar grandes líneas de un estado fuerte (leviathan) destinado a proteger a los hombres.

El hombre, en el estado de naturaleza, vive en perpetua guerra con sus semejantes, y la única manera de salir de este miserable y triste estado es mediante un pacto por el cual se constituya un poder capaz de hacer ley y de imponerla, para ello debe renunciar cada individuo a su derecho a hacer lo que quiere, la renuncia debe ser general y concurrente. Así surge el estado, una especie de Dios mortal, que puede usar a su árbitro el poder de todos con el fin de asegurar la paz y la defensa común. Por virtud del pacto los hombres, que antes constituían una multitud, llegan a ser un pueblo.

En resumen la doctrina de la soberanía de Hobbes, podríamos decir lo siguiente:

1) “el soberano debe ser un cuerpo determinado, sea una persona o un cuerpo compuesto de más de uno, debe ser persona o persona visible a quien los súbditos le pidan protección.

2) El soberano debe ser fuente de ley. El legislativo es la característica fundamental de la soberanía. Lleve consigo los poderes Ejecutivo y Judicial de gobierno.

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