Administración de un Consultorio Dental

Administración de un Consultorio Dental

Administrar cualquier empresa requiere de una relación entre la planificación, organización, dirección y control de la misma. Para llevar esto acabo debemos considerar una buena optimización de recursos financieros, tecnológicos y humanos.

Para tener una buena organización consideramos 4 puntos importantes:

Planificar: Que se refiere al proceso por el cual comienza por la visión que tiene la persona que dirige una organización, fijar objetivos, políticas y estrategias.

Organizar: Que responde a ¿Quién va a realizar qué tarea? E implica desarrollar un esquema organizado definiendo responsabilidades y obligaciones.

Dirigir: Capacidad que se tiene de persuadir por medio del liderazgo sobre los individuos para ejecutar los objetivos planteados, basado de la toma de decisiones.

Controlar: Consiste a medir el desempeño de lo ejecutado, haciendo comparación con los objetivos y metas establecidas. Se detectan errores y se toman medidas para corregirlos.

Servicio

El servicio que se va a prestar debe ser confiable para el destinado. Se debe reflejar la calidad de la organización y el odontólogo comunicará con su propia imagen la confianza y seguridad para que el paciente se sienta atraído a las instalaciones.

Las habilidades, actitud y conocimientos son fundamentales para satisfacer y lograr una estrategia de servicio con los fines propuestos; ya que no todos los pacientes reaccionan de la misma manera debido a experiencias, comentarios o recomendaciones de algún conocido, situaciones de estrés, poca atracción visual, etc. Derivándose la capacidad de decidir si continuar o no con el servicio en ese lugar y en las condiciones que se ofrecen.

Organización del tiempo

Esta parte es de suma importancia, ya que los tratamientos requieren ser programados y las actividades dentro y fuera del consultorio se deben señalar para tener mejor rendimiento en el consultorio.

La disciplina es un punto personal que debe ser muy notorio, ya que de ahí parte el saber ser puntual con la atención a los pacientes y saber pedirles puntualidad.

Los horarios del personal, de igual forma deben estar bien organizados para no atender cosas segundarias como prioridades y retrasar nuestras propias tareas.

Dar a elegir un horario al paciente, para que se sienta cómodo siempre y cuando esté dentro de nuestro horario laboral.

Con esto podemos tener un número mayor de citas por día, lo cual nos permitirá también tener nuestra vida personal organizada y podemos ayudarnos a comercializar nuestros servicios con calidad y eficacia, buscando satisfacer al paciente cuidando de nuestra imagen y dándonos a conocer por un excelente servicio.

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