DISCURSO PARA LOS BACHILLERES

Discurso para los Bachilleres 2014

Lic. Rosse Mary Robles Bilbao: Directora de la Unidad Educativa 25 de Octubre

Prof. Sara Céspedes Chanevi: Consejera de 6to de Secundaria Flamantes bachilleres

Colegas maestros de educación: Inicial, Primaria y Secundaria

Señores del: Consejo Educativo Social Comunitario antes Junta Escolar

Padres de Familia

Estimados Jóvenes: Flamantes Bachilleres

Para una buena cosecha se requiere buena semilla, buen abono y riego regular y constante. ¡He aquí el resultado!

Ustedes queridos estudiantes son esa semilla, con sus rostros alegres, risueños, felices de haber alcanzado un peldaño más de la meta trazada.

Después de tanto tiempo, llegó el gran día. Este día marcará huellas indelebles que perdurarán por siempre en vuestras vidas. Muchos de ustedes llegaron a esta institución hace algunos años, Delfos fue un hogar para ustedes, donde aprendieron, crecieron, perdonaron, e incluso conocieron su primer amor, compartieron una serie de vivencias y construyeron día a día, lazos de amistad, respeto y cariño que se han venido fortaleciendo, especialmente este último año.

Ustedes han vivido la mejor etapa de sus vidas con sus diecisiete o dieciocho años, llevan en sus mochilas: códigos de convivencia, proyectos de vida, conocimientos suficientes, experiencias de variada índole, lazos de amistad. Hagan de sus proyectos de vida, un plan de trabajo diario, sujeto a una revisión constante. Impriman a sus vidas un sello personal.

Hoy se cierra un ciclo de estudios, ustedes jóvenes bachilleres, tienen una sola oportunidad para escribir su propia autobiografía en un libro de innumerables páginas, aún en blanco, no copien actitudes, no imiten comportamientos, sean auténticos.

Nuestro Estado Plurinacional, necesita hombres y mujeres, comprometidos con la verdad, profesionales competentes, solidarios, honestos y emprendedores.

Hoy se despiden de grandes amigos y maestros, personas con las que compartieron momentos especiales, y para vuestros padres va mi felicitación por el sueño cumplido, ver a sus hijos graduados, listos para emprender el vuelo. El espacio de sus sendas se abre esperanzador, pero siempre necesitarán el calor, la ternura y la presencia de ustedes.

Ustedes, queridos jóvenes, soñaron con este momento, que hoy dejó de ser sueño y se transformó en una hermosa realidad, que se alimentó de paciencia, trabajo, confianza.

¡Alimenta tus sueños! La vida sin sueños no tiene sentido. Aún cuando te sea difícil soñar, no dejes de hacerlo.

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