EL ABORTO

El aborto es una de las cusas más frecuentes de la mortalidad femenina, un acontecimiento muy frecuente, que ha propiciado su casi total desconocimiento. Los perjuicios sociales, un moralismo mal entendido, los sentimientos de culpa, el miedo injustificado, han impedido una compresión del tema del aborto.

El aborto es la interrupción del embarazo lo que impide al feto continuar su vida en forma independiente. Se consideran abortos a fetos expulsados antes de las 24 semanas o que pesan menos de ,5 kg. Las estadísticas muestran cerca de la cuarta parte de los embarazos terminan en embarazos.

Se pueden menciona r dos tipos de aborto: el espontaneo y el inducido. El aborto espontáneo se produce de manera natural por causas aún no determinadas. Se relacionan con malformaciones del feto o problemas físico o emocional de la madre, como enfermedades infecciosas, tumores uterinos, ansiedad extrema y otras alteraciones psíquicas. La mayoría de abortos se produce ante de los 3 meses de embarazo

El aborto inducido es la interrupción del embarazo mediante la extracción del feto por intervenciones quirúrgicas. La inducción del aborto puede darse por causas económicas sociales, o salud de la madre. Los abortos inducidos en el primer trimestre son sencillos y seguros, sin embargo, existen riesgos que pueden llevar la muerte.

Las regulaciones sobre el aborto han cambiado notablemente desde la antigüedad hasta el día de hoy. Pues antes se lo practicaba para el control de la natalidad. Pero se fue restringiendo por religiones en donde se consideró una acción ilegal. Se prohíbo por la salud de las mujeres debido a los riesgos quirúrgicos. Se lo permitía cuando la vida de la madre peligraba.

En el siglo xx las leyes han cambiado para la práctica del aborto inducido pero todavía hay países que por en su mayoría por condiciones religiosas, conservan legislaciones condenatorias respecto al aborto. La despenalización para el aborto por causas justificadas ha seguido creciendo a nivel mundial el cual ha sido defendido en conferencias mundiales sobre la mujer, notablemente en Pekín de 1995.

Lo más preocupante es que en lugares donde existen prohibiciones del aborto inducido es donde se han provocado muerte de millones de mujeres, por las condiciones sanitarias e higiénicas en donde se la realiza. Muchas personas opinan que la decisión de continuar con el embarazo compete únicamente a la mujer, por lo que a mi parecer no debería estar penalizado en ningún lugar sino que deberían garantizar condiciones adecuadas para los diversos tipos de riesgos a los que se someten.

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