Juegos Olimpicos ¿deporte o negocio?

28/08/2016

Mauricio Alan Jesain García Sánchez

Mat: 09/003/0630

Lenguaje y pensamiento lll

Los Juegos Olímpicos

Generosa Distracción

Los juegos olímpicos u olimpiadas, una celebración que data del año 776 a. C. y   392 d. C de la época griega, llamados así por realizarse en la ciudad de Olimpia, considerados como fiestas religiosas, culturales y deportivas, con concursos, y sacrificios en honor a Zeus. Hecho que inspiro al Barón Pierre de Coubertin a revivir, los Juegos Olímpicos en el siglo XX, con la premisa de que la competencia deportiva podía producir el entendimiento y sana convivencia entre los países del mundo. así en 1896 se iniciaron los primeros juegos olímpicos modernos en la ciudad de Atenas y desde entonces se han realizan cada 4 años en distintos países del mundo, (a excepción de las ediciones de 1916, 1940 y 1944, debido al estallido de la Primera y Segunda Guerra Mundial). Siempre con el objetivo de generar un movimiento mundial basado en el deporte y en la sana competencia. (wikipedia, 2016) Sin embargo, ¿serán simplemente la sana competencia la que los motiva? ¿habrá intereses políticos de por medio?, ¿De qué manera impactará en México este evento?, ¿Cuál será la relación entre olimpiadas y negocios?

En el presente texto se abordará el tema de los juegos olímpicos a partir de la premisa ¿deporte o negocio?  Tomando como referente los juegos olímpicos de rio de janeiro 2016.

Es la búsqueda de un proyecto autosustentable los objetivos van cambiando, hasta desvirtuarse por completo, por ejemplo: si quisiéramos hacer una liga de futbol, pero carecemos de recurso materiales y económicos, seguramente buscaríamos la forma de solucionar dichas carencias y probablemente nos acercaríamos a patrocinadores o inversionistas para poder lograr nuestro objetivo. Sin embargo, como bien sabemos en una sociedad capitalista nada es gratis y seguramente el apoyo económico traería consigo diversas cláusulas de por medio, tal vez tendríamos que ceder el nombre o el mando de la liga, y así ellos decidirían quienes participan, o quienes tendrían derecho a ver los partidos, en resumen, crearían un mostro del proyecto inicial. Algo similar pasa con los juegos olímpicos, en principio resulta ser una magnífica idea sin fines de lucro, hasta que la ambición y la corrupción se apoderan de ella y cambia completamente los objetivos, convirtiéndose en un gran negocio.  En este sentido la Comisión Olímpica Internacional COI tiene el oro asegurado. De acuerdo a sus propias cuentas, el próximo ciclo olímpico generará unos 8.000 millones de dólares para el COI, que lo administra en nombre del espíritu olímpico. (lahaine.org. 2016). ¿pero cómo es que se gana toda esa plata? Según a la revista proceso, (2016)  

El gran negocio de los Juegos Olímpicos es la transmisión por TV: la venta de derechos le reporta cientos de millones de dólares a los organizadores, y las empresas que los adquieren se bañan en oro gracias a la publicidad. En México –y de hecho en toda Latinoamérica–, el gran ganador fue Carlos Slim, quien se quedó con el monopolio de la difusión en televisión abierta, en detrimento de TV Azteca y Televisa. Esto cambia el escenario que el país había vivido durante décadas: las emisoras públicas y la TV por cable cobrarán protagonismo.

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