La Contracultura

ENSAYO SOBRE LA CONTRACULTURA

La contracultura abarca toda una serie de movimientos y expresiones culturales usualmente juveniles colectivos, que rebasan, rechazan, se marginan, se enfrentan o trascienden la cultural, Por otra parte la cultura institucional me refiero a la dominante y con cambios para que nada cambie, muchas veces irracional, generalmente enajenante deshumanizante y que obstruye o destruye las posibilidades de una expresión autentica entre los jóvenes y que también aceita la opresión, la represión y la explotación por parte de las personas que ejercen el poder.

En la contracultura el rechazo a la cultura institucional no se da través de doctrinas ideológicas, sino que, muchas veces de una manera inconsciente, se muestra una profunda insatisfacción. Hay algo que anda muy mal, algo que no deja ser. Es lo que expresa la canción Satisfacción de los Rolling Stones, que no por nada es casi un himno en la contracultura y en la que por una cosa o por otra no se puede estar satisfecho.

La contracultura genera sus propios medios y se convierte en un cuerpo de ideas y señas de identidad que contienen actitudes, conductas, lenguajes propios, modos de ser y de vestir y en general una mentalidad alternativa a la del sistema. Por eso a la contracultura también se le conoce como “Culturas Alternas”. No se trata de una subcultura como se refieren muchas personas que integran ciertos grupos contraculturales a un cuerpo que se deriva de una cierta moda, generalmente extranjera, pues ni remotamente está por debajo de la cultura.

Por lo general se tiende a relacionar la contracultura con los movimientos de rebeldía juveniles de los años sesentas, quizá porque al sistema le gustaría restringir ese tipo de acontecimientos a un área específica del tiempo. Sin embargo, es evidente que las manifestaciones contraculturales se pueden rastrear desde mucho tiempo antes y que aparecen antes de los sesentas y continúan después en México y en numerosas partes del mundo. La contracultura muestra carencias evidentes y denuncia, a pesar de que a veces no sea el objetivo, es la enfermedad cada vez más grave de las sociedades manipuladas y sojuzgadas por centros de poder económico, político y cultural en todo el mundo.

Un ejemplo de la contracultura son los hippies, los cuales exponían ideas que rechazaba el sistema, los jipis mas macizos eran los vehículos de las ideas de los jipis y eran conocidos por muchos lugares por llegar en su camioneta pintada de colores vivos y apasionados, y con bocinas grandes en la parte superior de la camioneta para transmitir la música que ellos escuchaban al exterior. Decían: “Agarra tu patín y entra en la onda”, ellos dejaban el trabajo, la escuela solo para irse a hacer lo que querían, aunque, solo fuera un simple sueño de jóvenes. Eran adictos a la marihuana, las metanfetaminas, los hongos, el LSD entre otras drogas.

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