La Guerra con Chile y los Ferrocarriles en el Perú

La Guerra con Chile y
los Ferrocarriles en el Perú

Alvaro Jose Cruzado Raymondi^[1]

Contexto:
Entre los años 1869 y 1872, el Gobierno Peruano, dirigido en ese entonces por el Coronel José Balta y Montero, emitió gran cantidad de bonos. Los cuales fueron comprados por empresarios Londinenses, esto con el fin de financiar la construcción de ferrocarriles. Se pensaba en el Guano como un recurso inagotable -a diferencia de Manuel Pardo que en un principio apostó por la diversificación- o al menos no se preveía un uso adecuado de este, y eso trajo consigo el pensamiento errado de que se podrían respaldar las deudas con los ingresos que devenían. Esta actitud rentista por parte del estado desencadenó en el año 1876, la suspensión de la deuda externa. A pesar de muchas reducciones en gastos e intentos de no perder la viabilidad financiera del país, el Gobierno no tenía otra fuente de ingresos tan importante como la que generaba la renta guanera. Hasta la aparición del salitre, cuya posesión traería más desavenencias que ingresos al país.  En 1875, el entonces presidente Manuel Pardo, tomó la decisión de expropiar el salitre de Tarapacá. Esto afectó en su mayoría a capitalistas chilenos y europeos. Y este hecho es considerado como el primer roce con el país vecino. Lo que más tarde desencadenaría en la Guerra del Pacífico.

Luego de la desastrosa guerra, de la pérdida del salitre de Tarapacá, además de las islas guaneras del sur, los ferrocarriles quedaron inoperativos por dos motivos; uno peor que el otro: El ejército chileno dinamitó y destruyó todos los ferrocarriles a su paso y los que no fueron dinamitados, estaban inconclusos e improductivos; como dice Basadre al respecto: “Los ferrocarriles en su mayor parte no llegaron a ser concluidos en los plazos estipulados y suscitaron complejos problemas alrededor de su financiación, o de su administración o de su terminación” (Basadre). El hecho de no tener una conectividad ferroviaria también tuvo parte en la derrota frente al ejército chileno. Pues, durante la guerra no podían traerse armas cruzando el estrecho de Magallanes ya que era territorio chileno y a su vez la ruta más corta al proveedor europeo de armas; mientras que la otra ruta en dirección al Atlántico era sumamente lejana. Después de la guerra, al no tener un sistema de comunicaciones o un sistema de transporte eficiente en funcionamiento, tanto ni antes, como ni después de la guerra; se volvía aún más lejana la recuperación económica y social del país, en palabras de Guido Pennano: “…de no lograrse esta interacción de las distintas áreas geográfico-productivas del país, se tendrá, en lugar de un país articulado, una sociedad desmembrada, en la cual el elemento constitutivo más saltante será el ‘subdesarrollo heterogéneo’…” (Pennano). De esta manera, el Perú perdía una guerra y -aunque tampoco antes de la guerra se tenía una estructura ferroviaria consistente en todo el país- también algunos de sus pequeños brazos conectores con el interior del país.

Se calcula un aproximado de 500 km de líneas destruidas en la guerra, de un total de 1.500 km que existían en 1877^[2]. (Regal)

Dentro de los ferrocarriles destruidos en la guerra están^[3]:

1. Ferrocarril Paita-Sullana-Piura: Se inauguró coincidentemente con la guerra con Chile el 5 de Abril de 1879. Solo una parte fue destruida.
   
2. Ferrocarril Chimbote-Tablones-Huallanca: Empezó a construirse en 1872 a cargo de Meiggs. Para su construcción se utilizó mano de obra china. Los chilenos al mando de Lynch lo usaron para destruir haciendas. Posteriormente lo destruyeron.
   
3. Ferrocarril Chancay-Huaral-Hacienda Palpa: Construido en 1875 pertenecía a una empresa agrícola. Destruido por chilenos.
   
4. Tramo Ancón-Chancay del Ferrocarril Lima-Ancón-Chancay: Comienzo de construcción en el 1867 como parte del proyecto del FF.CC. Lima-Huacho. Los bombardeos y el viento terminaron por cubrir las vías con arena.
   
5. Ferrocarril minero de Cerro de Pasco: Antes de la guerra con Chile (1879) este FF.CC. unía varias empresas mineras pertenecientes a Cerro de Pasco. Fue completamente destruido por los bombarderos chilenos.
   
6. Ferrocarril Pisco-Ica: Inaugurado en 1871, para incentivar la producción del valle de Ica a mercados más lejanos. En 1881 un escuadrón chileno destruyó tanto el valle como el ferrocarril.
   
7. Ferrocarril Ilo-Moquegua: Se terminó de construir en 1873 a cargo también de Meiggs, siete años después el ejército chileno lo usó para llegar a Moquegua y saquearla. Posteriormente, destruyeron el ferrocarril.

Al terminar la guerra, los acreedores de la deuda externa exigían la cancelación de esta, que ya llegaba en ese entonces -el año 1888- a una impagable suma de 32 millones de libras esterlinas sin contar con los intereses que se le sumaban anualmente. En el año 1890, el Gobierno Peruano -en ese entonces con Cáceres a la cabeza- en aras de calmar la exacerbación de los acreedores Londinenses de bonos de los años 1896, 1870 y 1872, decide firmar el contrato Grace en el que se acuerda liberar al Perú de la deuda por los bonos emitidos. A cambio el Gobierno cedería, durante 66 años, los 1254 km. de ferrocarriles del Estado conformados por los FF.CC.: Central del Perú más la sección Lima-Ancón, Del Sur del Perú, De Trujillo, Paita-Piura, Pacasmayo, Chimbote, Pisco-Ica. Así también, el Estado Peruano se comprometía a la entrega de las islas guaneras hasta la extraer la cantidad de 3 millones de toneladas, el pago anual de ochenta mil libra esterlinas durante treinta y tres años, la libre navegación por el lago Titicaca y la concesión de dos millones de hectáreas en la Amazonía Peruana. En Londres, Grace transfirió sus acciones a los tenedores de bonos de la deuda y así se formó la Peruvian Corporation, empresa que tenía el deber de terminar, restaurar e iniciar la construcción de los ferrocarriles Peruanos.

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