Las doctrinas del Liberalismo Económico salvaran al Ecuador

Las doctrinas del Liberalismo Económico salvaran al Ecuador

Alex Montaluisa

COE

Phd. Alejandra Vela

6 de junio de 2022

El modelo liberal nace con el propósito de reinventar las ciencias económicas, jurídicas, etc. Sobre todo, las ideas que surgieron en el humanismo renacentista de ahí que América Latina nace o se construye bajo estos ideales con la colonización por parte de los europeos, es decir, tenemos un conjunto de valores morales en los que armonizamos como útiles para el progreso de la sociedad. Entonces cuando vemos que los países pobres de Europa, que adoptaron el Modelo económico liberal, ahora tienen una economía sustentable: no es descabellado presumir que en Ecuador la población más pobre es la que más necesita de un modelo liberal económico.

Sin irnos tan lejos del mismo modo a la vuelta de la esquina, tenemos a Chile uno de los pocos países que adoptado un sistema liberal económico sin matices. En 1973 cuando Pinochet conquista el poder en Chile, el PBI de Chile era superado por Cuba, aunque 30 años aproximadamente después Chile supera en más del doble el PBI de Cuba según el Banco Mundial; así por ejemplo en 1990, el índice de pobreza extrema es del 13,0% y gracias a las medidas tomadas por los Chicago Boys esta baja hasta 2,2% en 2013. Los Chicago Boys “Era un grupo de economistas chilenos la gran mayoría formados en el departamento de economía de la Universidad de Chicago siguiendo las ideas de Milton Friedman y Arnold Harberger”(Instituto Tecnológico de San Agustin, ).

Por otra parte, las herramientas y justificaciones que utiliza y propone la corriente filosófica liberal en temas económicos son:

El liberalismo económico es una doctrina que señala que la mejor forma de alcanzar el desarrollo económico y la eficiencia en la asignación de los recursos es a través de un mercado libre sin la intervención del Estado (regulaciones, impuestos, etc.) [...] De acuerdo al liberalismo económico, las fuerzas de oferta y demanda son la que de forma natural, nos llevarán a un equilibrio en donde los precios reflejan la escasez relativa de los bienes y se produce una asignación de recursos eficiente. (Roldan, 2017, pár. 1 y 3)

Es así que el precio de los productos será validado por aquel valor agregado que el fabricante le dé, o sea, escogeremos el producto de aquella empresa, que mejor haya optimizado sus recursos pues esta podrá ofertar el precio más rentable a sus compradores; en vista de que las empresas estarán obligados a competir, pues, la que mejor sirva al consumidor, prospera.

Por un lado, la liberalización extrema del sistema financiero, adoptada en 1994, favoreció temporalmente una conducta rentista generalizada orientada

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