Los Estados de Bienestar Tras la Segunda Guerra Mundial)

18 (texto 8 Fernández y López 2006  Los Estados de Bienestar Tras la Segunda Guerra Mundial)

Una serie de factores en las primeras décadas del siglo XX explican el nacimiento del Estado de Bienestar como respuesta a las demandas económicas, sociales y políticas, tanto de los ciudadanos como del propio sistema político.

Cronológicamente podemos distinguir tres grandes etapas en la evolución del Estado de Bienestar:

• LA primera, entre 1870 y 1920, el “periodo de experimentación” y se caracteriza por un fuerte debate teórico sobre el papel del Estado. El ejemplo de esta etapa es la Alemania de Bismarck algunas de las primeras medias que establecían un nuevo patrón de seguridad ligado al contrato de trabajo: buscaban proteger mejor a los trabajadores ante posibles accidentes.
• La segunda etapa abarca desde el final de la Primera Guerra Mundial (1919) hasta el final de la Segunda Guerra mundial (1945).La política social se fue consolidando como una parte estratégica de la acción del Estado, contribuyo a establecer un acuerdo básico sobre la legitimidad y la necesidad de la acción del Estado para hacer frente a la reducción de las desigualdades y mejorar la condición de vida de la población.
• La tercera etapa, desde 1950 hasta 1970, un proyecto de reconstrucción que se basan en la defensa del respeto de los derechos de los ciudadanos, pleno empleo, extensión de los derechos económicos y sociales.

1. TEORIA ECONOMICA Y ESTADO DE BIENESTAR

La consolidación del estado de Bienestar tiene una de sus bases en la obra de Keynes J., el economista mas influyente del siglo XX. Su punto de partida es la ineficacia de la libre competencia basada en el liberalismo económico: el mal funcionamiento de los mercados requiere una intervención del gobierno, desarrollando políticas para aumentar la demanda interna

El estado debe intervenir con programas de obras publicas que reactivan la inversión y con leyes sociales que aumenten la riqueza circulante, tanto trabajadores activos como enfermos, jubilados ... «los principales inconvenientes de la sociedad económica en la que vivimos son su incapacidad para procurar la ocupación plena y su arbitraria y desigual distribución de riqueza» (Keynes, 19.70: 328)

El objetivo principal de la intervención pública debe ser aumentar el volumen de empleo, lo que conlleva una mayor demanda de bienes y servicios.

1. LOS INFORMES DE BEVERIDGE

Son las dramáticas circunstancias de la Segunda Guerra Mundial las que motivaron los dos informes publicados: El primero en el año 1942 (Social Insurance and Allied Services, más conocido como Beveridge Report) y el segundo en 1944 (Full Employmente in a Free Society) constituyéndose en la base fundadora de los Estados del Bienestar del siglo XX.

Este planteamiento estratégico, planear la acción del estado para construir las bases de la paz, eliminar la pobreza en Gran Bretaña para ello el Estado debe ofrecer una seguridad social para liberar al ciudadano de la necesidad, no solo debe solucionar los problemas existentes sino prever los riesgos futuros, fomentar el pleno empleo y un sistema de SS con una visión global y proporcionar el bienestar a toda la población

Estos informes se convirtieron en el manifiesto teórico del Estado del Bienestar, y en 1948 entró en vigor la mayor parte de la legislación social británica siguiendo las pautas propuestas por Beveridge. Pero es necesario precisar que el Estado del Bienestar es el resultado de un largo proceso histórico en el que diversas variables.

IMP 1.3 CARACTERISTICAS DE LOS ESTADOS DE BIENESTRA EN LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XX

 Un Estado de Bienestar es un Estado tal donde el poder institucionalizado es utilizado de forma deliberada (por la política y la administración) en un esfuerzo por modificar el juego de fuerzas del mercado al menos en tres direcciones. Garantizando a los individuos un mínimo nivel de ingresos, un estatus o clase social con los mejores servicios sociales.

• Intervención estatal en la economía para mantener el pleno empleo
• Provisión pública de una serie de servicios sociales, incluyendo transferencias para cubrir las necesidades básicas de los ciudadanos en una sociedad compleja y cambiante (por ejemplo, educación, asistencia sanitaria, pensiones, ayudas familiares y vivienda)
• Responsabilidad estatal en el mantenimiento de un nivel mínimo de vida, entendido como un derecho social, es decir, no como caridad pública para una minoría.

El Estado del Bienestar ha adoptado una configuración específica. Si diferenciamos tres variables (la política social del Estado del Bienestar, la dirección macroeconómica keynesiana, y el compromiso con el pleno empleo:

Destacan tres hechos históricos básicos ue han facilitado las diversas configuraciones adoptadas por el Estado de Bienestar, el crecimiento económico, la legitimidad del Estado y el universalismo de los servicios sociales.

El Estado del Bienestar tiende a garantizar no solo los aspectos relacionados con los riesgos del ciclo vital, sino también aquellos relacionados con la mejora de la calidad de vida: se encarga también de optimizar la capacidad de la gente para trabajar, para encontrar trabajo e incluso para contar con un buen empleo, con una buena paga y un buen entorno de trabajo. El objetivo es permitir a las personas que armonicen el trabajo con la familia, resolver los problemas de tener hijos y trabajar y combinar la actividad productiva con un tiempo libre gratificante.

1.5 RETOS PARA EL ESTADO DE BIENESTRAR EN LA SOCIEDAD TECNOLOGICA AVANZADA

Se produce un fuerte debate teórico sobre la legitimidad y características del Estado de Bienestar, que sin embargo no ha conllevado una drástica reducción del gasto público: «durante los años ochenta y noventa el Estado del Bienestar no ha sido desmantelado, ni siquiera ha sufrido recortes sustanciales; sus principales programas se mantienen, de ahí que no se haya alterado su estructura o 'núcleo básico'.

Los procesos estructurales que afectan al trabajo, transforman radicalmente el concepto y la práctica de lo que denominamos «ciudadanía social» dado que diversos derechos sociales han ido vinculados históricamente al trabajo: Y un trabajo que no conlleva un salario digno y ciertos derechos y protecc10nes sociales, desvincula al individuo de esa realidad práctica que debe ser el ejercicio de la ciudadanía social tal y como se ha construido en los últimos dos siglos en los países occidentales, y que cristaliza en la formulación del concepto de «ciudadanía social» (Marshall, 1998).

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