REFLEXIÓN - DISCRIMINACIÓN EN MEDIOS LOCALES

Es meritorio recalcar que en la prensa más cercana a nosotros, a pesar de sus puntos débiles en distintos ámbitos, no haya sido capaz aún de rozar ese sensacionalismo barato, específicamente discriminatorio, en que se apoyan algunas cadenas, periódicos y creo, no afirmo, algunas radios nacionales para vender/publicitar y ganar más adeptos con sus podridos mensajes.

No es válido y menos aceptable que se tenga por normalidad aceptar conceptos tan retrógrados como la mofa por discriminación racial/étnica que es la continua enfermedad que nos acosa como sociedad, la cultura peruana lamentablemente ha permitido la pluralización de estos espacios mediáticos a consecuencia de infinidad de aspectos arrastrados con el tiempo, considero que este pequeño espacio no compete para definir tales puntos del pasado.

En Arequipa no he contemplado felizmente tales atrocidades en la programación o publicidad, aunque siempre mantienen una ligera aceptación esos tirajes de a 50 céntimos que son una calamidad el solo contemplar su portada, aunque también, sin necesidad de ser tan analíticos, podría afirmar que tienen una cabida comercial/aceptación muy ínfima, lo cual es reconfortante. Radialmente priman otros defectos, pero discriminatorios definitivamente no, al contrario, el otro extremo es lo que aqueja al periodismo radial local, que cualquiera pueda hablar, y no me refiero al público, pero también es controversia de otro espacio.

El tipo de discriminación no es directo en los medios arequipeños, quiero decir, que no se hace un uso vulgar y explícito del mismo, pero si se dejan de lado los temas que como periodista menoscabamos tal vez por algo erróneamente consideramos más importante, obviamos los derechos de cantidad de discapacitados físicos, solo por mencionar, los cuales conviven día a día con nosotros y mínimamente los medios de los tres campos primordiales no presionan de ninguna forma para la igualdad de sus derechos, entonces nos estamos refiriendo, remitiéndome al inicio de este párrafo, no a una discriminación tan notoria, sino a una carencia informática sobre discriminación, de la cual la culpa nos corresponde.

De igual forma, la discriminación laboral, otro aspecto que se presenta frecuente o con lapsos prolongados de tiempo, no pasan de ser notas diarias, y la empresa X que haya cometido el error de incluir en sus requerimientos: SOLO PARA TEST CLARA, O, SOLO PARA MUJERES ENTRE 17 A 30 AÑOS, termina en el rincón del olvido sin una sanción meritoria por los comentarios discriminatorios, y la única causa de su victoria; la dejadez, el menosprecio, desinterés o quien sabe qué clase de extraña flojera que haya cogido al periodista/reportero para no cumplir su labor con esa nota/tema, para finiquitar el párrafo, me refiero a la falta de presión mediática.

Concluyendo estas pobres líneas de un simple observador, la discriminación abunda y seguirá su prolífico

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