Egipto Y El Arte

Egipto:

Su nombre oficial es República Árabe de Egipto. Está situado en el nordeste de África, muy aislado de otros países por su situación geográfica, se recorre al sur por el río Nilo, éste tiene mucha importancia en el desarrollo de su civilización. La sociedad egipcia estaba estructurada como una monarquía absoluta cuya cabeza era el faraón, quien era dueño de las tierras y tenía el poder total sobre la población.

La historia del Antiguo Egipto se divide en tres imperios intermedios de conflictos internos y denominación por gobernantes extranjeros. El Antiguo Egipto se caracterizó por el florecimiento de las artes y la construcción de inmensas pirámides. El periodo medio (2050 – 1800 a. C.) fue en donde alcanzó un fuerte nivel económico. En el Nuevo Imperio (1567 – 1085 a. C.) la monarquía egipcia alcanzó su edad dorada expandiendo sus dominios bajo la dirección de los faraones de la dinastía XVIII. La última dinastía fue derrocada por los persas en el año 341 a. C., luego de esto, fueron gobernados por griegos y romanos, época que dio inicio en el año 30 a. C. Tras la derrota de Cleopatra y Marco Antonio en la batalla de Actium. Después de esto tuvieron siete siglos de estabilidad económica y paz.

Egipto destacó en muchos campos del conocimiento, como la astronomía, la arquitectura y el arte. Tenemos un gran número de pirámides y esfinges que nos dicen mucho de lo que fue el arte egipcio en su momento.

La escultura tiene características muy particulares, las cuales prácticamente no cambian en los tres mil años de esta civilización. No surge como una necesidad estética, representa el poder, unido con el deseo de perdurar eternamente; por lo tanto, tienen una finalidad política y religiosa. Las figuras parecen esperar el paso del tiempo, prácticamente sin expresiones, no pretende expresar movimiento, esta rigidez es un gesto de eternidad. Están hechas para ser vistas de frente, eran completamente simétricas, divididas por partes iguales verticalmente. El material más utilizado era la estatuaria de piedra, esto se debía a que era un material muy sólido; sin embargo, también se llegaba a utilizar otros materiales como la madera y el metal. Las representaciones escultóricas eran mu variadas, iban desde representaciones de rituales hasta solo la figura humana. Hablando de figuras humanas, la escultura egipcia se puede dividir en las siguientes:

Estatua de pie (solemne, mirada al frente, brazos a lo largo del cuerpo, generalmente con los puños cerrados y la pierna izquierda ligeramente adelantada). Estatua sedente (el cuerpo estructurado en dos ángulos, manos sobre los muslos o una mano en el muslo y otra cruzada en el pecho). Escribas (es un tipo especial de la estatua con estructura piramidal, sentado en el suelo y con piernas cruzadas en una perfecta simetría axial). Retrato

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