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En la lectura Quintiliano


Enviado por   •  15 de Octubre de 2012  •  Informes  •  430 Palabras (2 Páginas)  •  279 Visitas

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En la lectura Quintiliano, como que tenía bastante práctica en las disputas del foro, hace ver cuánto se distingue el abogado perfecto del mediano; el que posee una elocuencia nerviosa y del que va fiado en una retórica y que no pasa de la corteza de las palabras; el que defiende al reo con cierta esperanza, Quintiliano provee, digamos así, de todo género de armas defensivas y ofensivas a su orador, así nuestro ilustre maestro advierte al abogado los sucesos en que, debe apartarse de los preceptos del arte, disimular, caminar con sencillez,

Para esto no solamente se vale de las observaciones y práctica de los más hábiles oradores y abogados griegos y romanos acomodadas a todos los géneros de elocuencia, sino de innumerables sucesos y ejemplos particulares: haciendo ver cómo se manejaron para vencer dificultades insuperables; cuándo negaban el hecho sobre que se litigaba; cuándo lo confesaban sencillamente, pero con mayor ventaja; cuándo convenían con el contrario en ciertas cosas, para merecer el crédito del juez.

Quintiliano dice que esto se llama elocuencia, y en todo aquello que en cualquier asunto que trate el orador, contribuye para persuadir sin resistencia; Esto le movió a Quintiliano a escribir sus Instituciones, fruto de veinte años de enseñanza y muchos de práctica: el ver que la elocuencia, habiendo degenerado no poco de su antiguo vigor.

Por otro lado sus escritos, son el método de estudios más completo que pueden desear los que se ocupan en enseñar a la juventud; y encierran la educación de la primera edad. En prueba de ello, Quintiliano toma la instrucción de su orador nada menos que desde la cuna.

Más adelante, cuando la edad comienza a ser capaz de mayor instrucción. Aquí es donde Quintiliano se interesa tanto en el aprovechamiento de unos años tan capaces de todo, como él mismo demuestra, que no quiere que se pierda instante. Porque, si bien dirigida esta edad es incontable cuántos conocimientos útiles puede aprender, por tener entonces las fuerzas nuevas y despejadas de cualquier otra idea así adquiere achaques que duran toda la vida. Por tanto, encarga a los padres y maestros que los primeros conocimientos sean útiles, sólidos y relativos al fin adonde aspiran; y para lograrlo, les dice qué libros han de leer y con qué orden; qué distribuciones han de hacer de ejercicios y tareas; cómo los han de acostumbrar desde el principio a una pronunciación fina y delicada, evitando aquellos resabios que a poca costa se corrigen; y dejándolos tomar cuerpo van a decir no poco para impedir el fin de la oratoria.

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