ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Juana Ines De La Cruz


Enviado por   •  12 de Mayo de 2015  •  1.855 Palabras (8 Páginas)  •  150 Visitas

Página 1 de 8

Juana Inés De la Cruz

A más de tres siglos de su fallecimiento, Sor Juana Inés de la Cruz, el enigma de su vida y la exquisitez de su obra siguen fascinando al mundo entero, Sor Juana es sin duda, la mayor exponente literaria de la cultura Mexicana misma que ha repercutido fijamente en la literatura universal moderna.

Desde muy pequeña destaco por sus ideales liberales y singulares cuentan que cuando era niña, Juana Inés no comía queso porque había escuchado que hacía tonta a la gente podía más en ella el deseo del saber que el del comer haciendo claro su entusiasmo por aprender y conocer mas; Desafortunadamente en le época que ella se encontraba a las mujeres no se les permitía el acceso a la educación ya que las veían como seres inferiores, Esto causo conmoción en Juana Inés llevándola a tomar medidas estrictas para poder tener acceso a la educación y poder seguir creciendo como persona.

Dichos actos son dignos de reconocer y hacer llamar Heroína a Juana Inés De La Cruz, por distintas razones unas de ellas y las mas destacas son: Su manera de pensar y la forma en que hizo que esta quedar plasmada por medio de escritos como sus versos y su prosa, La manera en que se hizo destacar entre los hombres y distinguir al sexo femenino y hacer notar a la sociedad que merecían mas de lo que tenían de igual manera dar valor a otras mujeres para que siguieran su ejemplo y destacaran.

Juana Inés de Asbaje y Ramírez; San Miguel de Nepantla, actual México, 1651 - 1695 Escritora mexicana, la mayor figura de las letras hispanoamericanas.

Juana Inés creció principalmente entre las haciendas de Nepantla y Panoaya junto a su abuelo materno quien sembraba maíz, trigo y criaba ganado.

A los tres años Sor Juana ya sabía leer, a los siete pedía que la mandaran a estudiar a la Universidad y a los ocho escribió una loa para la fiesta de Corpus.

En 1656, a la muerte de su abuelo, su madre envió Sor Juana a la capital a vivir a la casa de su hermana, María Ramírez, esposa del acaudalado Juan de Mata.

Ahí Sor Juana Inés estudió latín “en veinte lecciones” con el bachiller Martín de Olivas, bastándole solamente esas pocas para dominar esta lengua.

La vida de Juana Inés cambiará en la muy leal y noble ciudad de México. Primero llegó a casa de María, donde aprendió labores femeninas y al mismo tiempo empezó a recibir sus primeras lecciones de gramática latina con el bachiller Martín Olivas. Tiempo ingresa a la Corte Virreinal hacia 1665 y el 14 de agosto de 1667 ingresa al convento de San José de carmelitas descalzas.

Sor Juana Inés De La Cruz a pesar de las dificultades y condiciones que experimento en la época en la que vivía Una época de represión hacia las mujeres, donde solo se les consideraba como objetos, se hizo destacar por sus ideales que no encajaban con los pensamientos o supuestas reglas que la sociedad imponía en ese entonces.

Fue una mujer a la que le parecía injusto el trato y forjamiento de las mujeres, le parecía absurdo que solo los hombres tuvieran voz y boto en la sociedad dejando a las mujeres a un lado. En esta misma sociedad no se les permita el derecho de estudiar a las mujeres ya que les veía como un ser de menor coeficiente que solo servía para tareas domesticas o procrear hijos; Juana como ya antes mencionado tenia distintos ideales y un creía que las mujer tanto como los hombres estaban al mismo nivel y lo que un hombre hacia una mujer lo podía hacer, entonces ¿Por qué privarle el derecho de estudiar a la mujer? A la corta edad de ocho anos ella ya sabia leer y escribir, por lo que se hay los rumores de que a presar de la edad que tenia le pidió a su mama que la llevara a la universidad, es claro que dicho deseo jamás se cumplió pero ella no se rindió, Juana rompió el silencio que se esperaba de ella cuando se le pidió que callara ella no retrocedió. Juana defendió sus derechos a la inteligencia humana y se aseguró de que sus ideas serían conocidas por todos.

En aquellas épocas coloniales, las opciones que tenias al ser mujer eran casarse, prostituirse o ingresar al convento. La opción que le daba más liberad de estudiar era la de ser monja y fue así como ella tomó los hábitos y deliberó su obsesión con las letras. De esa manera podía escribir e ir aprendiendo de cierta manera libre. Sor Juana afirmo claramente que ella no tenía vocación para el matrimonio, además, la vida matrimonial hubiera arruinado su carrera literaria, pues hubiera tenido que dedicar su vida a atender a su esposo y familia. Y por supuesto, Sor Juana tenía un intelecto maravilloso que tenía que desarrollar y su ingreso al convento le ofrecía esa posibilidad.

Por otra parte no era el mejor momento para llevar una vida de soltería con libertad como podemos hacerlo en la actualidad. Sor Juana fue una visionaria y comprendió sus limitaciones en ese contexto y entonces optó por tomar la vida de una monja, pues éste representaba el mejor tipo de vida que podía tener una mujer soltera.

El convento fue para Sor Juana el medio de acceso a los libros, al conocimiento y a la escritura y fue de esta forma como comenzó a dar pie a cada uno de sus escritos de sus versos y su prosa. A tal punto de que su fue reconocida incluso en Europa.

En plena madurez literaria Sor Juana hizo una crítica a un discurso sobre “las finezas de Cristo en sus últimos días” del padre portugués Antonio Vieyra esta crítica se publicó bajo el nombre de “Carta Atenagórica.” Esto provocó que el Obispo de puebla Manuel Fernández le hiciera una invitación a Sor Juana a que dejara la literatura

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (10.6 Kb)  
Leer 7 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com