Agroecologia

El desarrollo del cultivo del jitomate comprende tres etapas principales, que son conocidas con el nombre de fases de desarrollo, aunque también se les nombra etapas fenológicas, las cuales son: inicial, vegetativa y reproductiva.

Fase inicial: Comienza con la germinación de la semilla y su característica principal es que ocurre un rápido aumento de materia seca. Durante esta fase la planta es llamada plántula e invierte toda su energía en desarrollar nuevos tejidos de absorción y fotosíntesis.

Fase vegetativa: Es la continuación de la fase inicial ya que el aumento de materia sigue ocurriendo pero de un manera más lenta, sin embargo, la planta requiere de mayor cantidad de nutrimentos para satisfacer las necesidades de las hojas y ramas en crecimiento. Esta etapa termina con la floración.

Fase reproductiva: Comienza con la fructificación y sus características principales son que el crecimiento vegetativo se detiene (en variedades de hábito determinado), porque los frutos comienzan su desarrollo y absorben la mayoría de los nutrientes que la planta obtiene.

De manera general cada una de las fases de desarrollo del jitomate tiene la siguiente duración: fase inicial de 1 a 21 días; fase vegetativa de 22 a 80 días, que incluye el desarrollo vegetativo (22 a 49 días) y la floración (50 a 80 días); y la fase reproductiva de 81 a 100 días.

Estas fechas son solo indicativas, pues las condiciones climáticas las pueden modificar drásticamente. Así mismo hay distintos tipos de variedades cuya maduración se da a tiempos distintos: precoz (65 a 80 días), intermedio (75 a 90 días) y tardío (85 a 100 días). Con días se hace referencia a los días después del trasplante.

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