La prevención de las enfermedades de transmisión sexual

Conclusión.

La incidencia de las enfermedades de transmisión sexual está en aumento, en parte debido a que en las últimas décadas, las personas jóvenes tienen actividad sexual más tempranamente y se casan más tardíamente. Como resultado, las personas sexualmente activas hoy en día tienen más probabilidad de tener muchas parejas sexuales durante sus vidas y por lo tanto tienen más riesgo de desarrollar enfermedades de transmisión sexual.

Los Problemas de salud más comunes que provocan las enfermedades de transmisión sexual a largo plazo que se pueden producir si no se tratan estas enfermedades están lo que es la esterilidad, dolor crónico, cáncer del cuello del útero (cerviz), daños en el corazón y en el cerebro, tener una enfermedad de transmisión sexual también incrementa vulnerabilidad al VIH.

Encontramos también los síntomas más comunes que son las llagas o úlceras genitales, descarga anormal desde la vagina o la uretra, dolor en la relación sexual en el caso de la mujer, dolores o molestias en la zona abdominal baja en el caso de las mujeres

Aunque al tener una enfermedad de transmisión sexual algunas personas muestran los síntomas, otras especialmente las mujeres no los muestran aunque tengan la infección.

Cuando se diagnóstican y se tratan tempranamente las enfermedades de transmisión sexual pueden ser curadas efectivamente.

Las enfermedades de transmisión sexual bacterianas, como la gonorrea, sífilis, clamidia, chancroide y la tricomoniasis, se pueden tratar con éxito con antibióticos. Pero las causadas por virus no se pueden curar, pero se pueden tratar los síntomas con medicamentos y con un estilo de vida.

Las enfermedades de transmisión sexual por virus incluyen la hepatitis b, el herpes genital, las verrugas genitales (virus del papiloma humano, VPH) y el VIH.

Los factores de riesgos para tener estas enfermedades es la manera de inicial una vida sexual durante la adolescencia, tener muchas parejas sexuales, tener una pareja sexual que tiene muchas parejas sexuales y el no usar durante el acto sexual condón o preservativo es otra de ellas.

De esta manera se puede prevenir mediante, tener una relación sexual monógama con una pareja no infectada, utilizar un condón o preservativo en todas las relaciones sexuales, postergar la edad a la que comienza a tener relaciones sexuales, utilizar agujas limpias y desinfectadas para inyectar drogas intravenosas, lavarse muy bien los genitales antes y después de la relación sexual, lavar y revisar los genitales de la persona con quien se va a tener la relación sexual, si se observan algunos síntomas de alguna enfermedad de transmisión sexual, se debe evitar tener relaciones, visitar al médico diariamente ayuda a descartar una enfermedad de transmisión sexual a tiempo y así ser tratada.

Por estas razones,

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