CONTAMINACIÓN: DESTRUCCIÓN DEL HOMBRE O DESTRUCCIÓN DEL PLANETA

CONTAMINACIÓN:

DESTRUCCIÓN DEL HOMBRE O DESTRUCCIÓN DEL PLANETA

"Quien planta árboles está al lado de la eternidad. Nuestra codicia legítima de más bosques es la búsqueda de una humanidad más humana. "

Joaquín Araújo

La influencia del hombre sobre la vida en nuestro planeta cada instante es más notoria. La casi totalidad de nuestros actos, sobre todo con el gigantesco avance tecnológico, influyen directamente sobre el medio ambiente y casi siempre de manera negativa.

La contaminación que el hombre provoca sobre el clima se produce en tres niveles: la relacionada con la Atmósfera, la contaminación de las aguas: lagos, mares y ríos; y la contaminación de la tierra.

Hace aproximadamente dos millones de años el hombre aparece sobre la Tierra. Al inicio su vida se desarrollaba en función de los recursos que tenía a su alcance, es decir de los animales y vegetales de los que podía abastecerse. El crecimiento familiar poco a poco va agotando los recursos y entonces el hombre se ve obligado a movilizarse en busca de ellos. Desde ese momento, desde que los medios de la naturaleza se alteraban, el hombre ya estaba influyendo, quizá sin conciencia de ello, sobre el ambiente y por consiguiente, sobre el clima.

De acuerdo a estudios realizados, se determina que los óxidos son al parecer los principales contaminantes de la atmósfera. Estos contaminantes llegan como consecuencia de los motores de los vehículos que se abastecen con combustibles de origen fósil y como consecuencia de las emisiones industriales y urbanas, pero lo más sorprendente es que también la naturaleza influye negativamente con las emisiones de Dióxido de Carbono como consecuencia de las erupciones volcánicas. Por otro lado los grandes incendios forestales crean condiciones similares al desprender una gran cantidad de energía calorífica, la misma que queda encerrada en las capas de la Atmósfera, provocando el aumento de la temperatura o lo que conocemos como el calentamiento global.

La contaminación de los mares, ríos y lagos, se produce por las sustancias procedentes de los alcantarillados urbanos, de los vertedores industriales, de las empresas ganaderas e incluso de las pequeñas fábricas manufactureras. Todas estas sustancias aumentan la materia orgánica en el agua, disminuyendo el contenido de Oxígeno y acrecentando la actividad bacteriana. La desaparición del Oxígeno, sumada a las emisiones de compuestos no degradables a ríos o lagos como: plaguicidas o insecticidas, que son utilizados en cantidades descomunales para la producción agrícola, los derrames petroleros que jamás pueden ser revertidos en su totalidad, empeoran la contaminación.

La desaparición paulatina de los bosques primarios, también es consecuencia de la acción del hombre sobre los

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