Carbono amorfo como pigmento negro

Carbono amorfo como pigmento negro

El carbono amorfo es una forma semejante al grafito, pero con muchos “defectos”, esto significa, sin las extensas hojas que aparecen en el grafito. Puede ser preparado de varias formas (y con diferentes grados de pureza), desde la captura del hollín, hasta la carbonización de material vegetal o animal, que lleva a carbones activados.

Sus usos principales son como pigmento negro, en colorantes, alimentos y otros materiales como neumáticos y como material desodorizante y filtrante para agua y gases en máscaras.

Grafito para escritura y más

El grafito está compuesto de extensas capas de átomos de carbono, que forman hojas con anillos unidos – más o menos como una tela-. Estas telas de carbono se deslizan fácilmente unas sobre otras y al escribir con un lápiz de grafito, el rastro dejado es causado por estas capas que van esparciéndose a medida que el lápiz es rozado contra el papel.

Esta misma propiedad “deslizante” del grafito permite que el sea utilizado como lubricante, especialmente para altas temperaturas – ya que este material resiste a más de 3000 ºC antes de comenzar a fundirse-. Por este mismo motivo y también por conducir electricidad con razonable facilidad, el grafito puede ser utilizado como electrodo para hornos eléctrico, donde conduce corriente eléctrica suficiente para fundir metales.

Los diamantes no son para siempre

Los diamantes son la substancia natural más dura que se conoce. Son densos y transparentes, cuando puros, con un alto índice de refracción que esparce la luz con más eficiencia que un prisma de vidrio (especialmente luego que es lapidado).

Debido a su dureza, son tradicionalmente utilizados para cortar otros materiales y más recientemente han sido fabricadas finas capas de diamante para proteger superficies muy especiales. También son aislantes eléctricos y excelentes conductores de calor. Pero los diamantes no son para siempre ya que siendo de carbono, pueden quemarse en llamas suficientemente calientes en presencia de O2.

Fullerenos son bolas de carbono

Los fullerenos son el único alótropo molecular del carbono, o sea, no son formas con millares de átomos aglomerados. Son minúsculas bolas con números determinados de átomos de carbono. El C60 es el más común, pero existen decenas de otras moléculas, como el C20 y el C70.

Fueron descubiertos en 1985, cuando científicos investigaban los tipos de macromoléculas de carbono que podrían formarse en las nebulosas del espacio. Hoy se sabe que hay trazos de fullerenos en hollín y en algunos minerales. Aún no existen aplicaciones comerciales, pero si, muchas aplicaciones potenciales.

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