Decalogo Etico

Orientado a las actividades académicas, como son las tareas que desempeñamos en la universidad latinoamericana; planteamos algunos principios éticos para el desempeño dentro de la misma.

Los cuáles los hemos dividido en dos, las primeras cinco letras corresponden a actitudes personales, mientras que las segundas cinco normas expresan actividades escolares por lo tanto en un ejercicio de acrónimo hemos formado el decálogo del estudiante universitario

Como ya se ha visto en la clase “La importancia de la ética en la formación profesional”, es de suma importancia contar con un sistema de valores, en un entorno cultural, social y político como el nuestro; que sobrepasa los límites de lo aprendido en casa en tema de ética.

Cabe aclarar que los valores institucionales tienen la característica de que “son catalizadores que tienden a personalizar el trabajo, la dirección, la motivación, el capital y las relaciones con el entorno, dándoles una proyección social y solidaria”, Llano C, Llano A, (1998).

Excelencia: No hay calidad personal sin exigencia y sin esfuerzo. Vencer la pereza y la comodidad son el inicio de la excelencia.

Lenguaje positivo: Modifica el actual, evitando usar palabras como “nunca”, “siempre”, “no puedo” o “no sé”. El lenguaje y las palabras son una interpretación de la realidad y por supuesto, no son la realidad.

“personas tóxicas”: Que perturban el bienestar ajeno y vampirizan al semejante, te aportarán nada más que problemas, amargura e infelicidad.

Emprende todo el tiempo: No mermes tu actitud frente a los obstáculos, asúmelos como un desafío inevitable.

Cambia tu actitud mental: En cada uno de los aspectos de tu vida, trata de ver la botella medio llena no medio vacía.

Actuar responsablemente: Evitar la doble moral, es actuar con responsabilidad; tanto en los actos, como en las distintas circunstancias que surgen. es importante cumplir con los pasos que nos indican en la universidad para desarrollar las actividades.

Legalidad: Para evitar interpretaciones propias acerca de las diferentes definiciones de actos éticos; recordemos que solo existe una ética universal e indivisible, es decir, no podemos tener valores ficticios o convencionales dentro de la institución. Es imprescindible apegarse a las normas éticas establecidas por la universidad.

Organización equitativa: Nadie es más que nadie; todos tenemos una dignidad como personas. Algunos tienen un rol diferente pero seguimos siendo iguales “la organización debe supeditarse al desarrollo de los demás” Llano C, Llano A, (1998), entendiendo que el fin es el desarrollo de las personas y no la forma en cómo se organizan.

Gratitud: El bien que se obtiene en la universidad es valioso para todos, porque dependemos unos de otros; el

agradecimiento es muestra de nobleza y consistencia del bien intrínseco en cada ser. Ser agradecido por lo aprendido y ser agradecido al transmitir ese conocimiento a los demás.

Orgulloso de sí mismo y de la institución: Hacer siempre el bien y evitar el mal, caminar con la frente en alto no es sinónimo de presunción sino más bien de seguridad y libertad; al actuar lo hacemos conforme a los valores así podemos decir que nuestros trabajos son buenos y provechosos para nuestro desarrollo.

Realizando este ejercicio, nos pudimos dar cuenta que son infinítas las áreas que nos podemos normar y superarían los diez enunciados, sin embargo empezando con estos con constancia y empeño, creemos firmemente que podremos mejorar tanto en lo personal como en lo académico.

Referencias:

• Actividades llevadas a acabo en la sesión presencial el martes 11 de febrero de 2014.

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