El Cancer

EL CANCER

Se denomina cáncer al crecimiento anormal de células originado por una irritación local o por un carcinógeno.

El cáncer no es una sola enfermedad, sino que es un grupo de muchas enfermedades, todas en relación con las células. De aquí se derivan los tumores de los cuales existen dos tipos: benignos y malignos.

Los tumores benignos no son cancerosos, los malignos sí. Los tumores benignos crecen en un solo lugar, es decir, no pueden invadir otras partes del cuerpo, pero aun así pueden ser peligrosos si presionan órganos vitales, tales como el cerebro. A contrario de los malignos, estos si son cancerosos y pueden dañar tejidos y órganos cercanos al tumor, además puede entrar al flujo sanguíneo y es así como el cáncer alcanza otras partes del cuerpo a esto se le llama metástasis.

Los tumores malignos pueden clasificarse en dos categorías, las cuales son carcinomas y sus lugares más comunes son la piel, la boca, el pulmón, los senos, el estómago, el colon y el útero. Por otro lado tenemos los sarcomas, estos se encuentran en cualquier parte del cuerpo.

Existen diferentes tipos de cáncer y cada uno de ellos se genera por causas diferentes, algunos canceres son más comunes que otros y las posibilidades de supervivencia varían según el tipo.

El cáncer no solo implica células, sino que también depende de muchos factores en el medio ambiente como lo son la exposición a sustancias químicas tales como el asbesto, níquel, cadmio, uranio, radón, cloruro de vinilo, bencideno y benceno, todos estos son ejemplos de carcinógenos. Por otro lado tenemos al tabaco que es reconocido como el carcinógeno más común en nuestra sociedad, este no solo puede causar cáncer en los pulmones sino que también se asocia con canceres de la boca, faringe, laringe, esófago, páncreas, riñón y vejiga. La radiación ionizante también puede provocar cáncer, dentro de esta se encuentran las radiografías, rayos de sustancias radioactivas y rayos ultravioletas de la exposición al sol. Y por último tenemos el factor de la herencia, la cual es común encontrar más frecuentemente el algunas familias que en otras.

El cáncer no tiene compasión, no se fija en tu color de piel, o en tu estatura, en tu clase social, ni siquiera en tu edad, el cáncer se presenta en todas las edades incluso en niños, pero es más común en personas mayores de sesenta años. Investigando en internet encontré este dato curioso y quise compartirlo, dice que una de cada tres personas padecerá cáncer en algún momento de su vida. (Científico Tak Mak.)

La aparición del cáncer es un proceso prolongado que genera cambios, y con el transcurso del tiempo las células siguen creciendo. Y se le llama periodo de latencia desde el tiempo del cambio genético hasta la presentación del cáncer.

El cuerpo presenta células cancerosas todo el tiempo, pero el sistema inmune las reconoce como células extrañas y las destruye.

Es importante estar alertas y detectar cualquier síntoma, antes de que la afección de propague. Desgraciadamente las etapas tempranas del cáncer son sin dolor y es más difícil notificarlas, por este motivo las personas hacemos desidia y tardamos en entrar en tratamiento.

Entre los síntomas tempranos encontramos la pérdida de peso inexplicable, el sangrado o hemorragia extraño, la indigestión persistente, la presencia de secciones blancas en la boca o manchas blancas en la lengua. Creo que es verdaderamente importante que estemos observando algún cambio extraño en nuestro cuerpo así podremos notificar algún síntoma, en caso de tenerlo. Si así fuera y lo detectamos a tiempo corremos menos riesgo de padecer cáncer.

Para la detección del cáncer se necesita de herramientas, estas pueden incluir la biopsia, esta es la remoción de tejido vivo para el examen microscópico de las células; los ultrasonidos, estos consisten en el uso de ondas de sonido reflejadas de alta frecuencia para diferenciar varios tipos de tejidos; la tomografía computada que es el uso de radiografías para producir una foto transversal de la partes del cuerpo; las imágenes de resonancia magnética la cual trata del uso de campos magnéticos y ondas de radio para mostrar modificaciones en los tejidos blandos sin el uso de radiografías; y por último los autoexámenes.

Quise incorporar algunas recomendaciones que me gustaría compartir y espero sean útiles, puede reducir o evitar la exposición a cancerígenos o agentes

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