El aluminio y los cultivos

El aluminio es un elemento esencial para el crecimiento de las plantas pero el exceso de este inhibe el crecimiento del sistema radicular. En Colombia tenemos cerca de un 85% de suelos ácidos, con un pH menor a 5,5 lo que los hace suelos susceptibles a altas concentraciones de H+, Al y Mn lo cual disminuye la capacidad de absorción de agua y nutrientes.

Más del 15% del suelo de la tierra está compuesto por Al2O.

Esta concentración de Al en suelos neutros o alcalinos no es toxica pero cuando hay reducción en el pH se incrementa la solubilidad, entonces se hace más asimilable por las plantas, este es uno de los factores más limitante para la producción agrícola, esto también ocasiona la destrucción de los minerales de arcilla y de otros silicatos lo que contribuye al rápido deterioro del suelo.

En los horizontes del suelo ricas de M.O la mayor parte de los iones de Al forman compuestos no tóxicos con los compuestos húmicos, pero otros iones de Al pueden adherirse a los minerales de las arcillas y ocurre una transformación en cloruros de Al que ocasionan baja CIC; en suelos que poseen baja M.O la concentración de sulfatos bajo condiciones de reacción acida del suelo, una parte de los iones OH pueden ser reemplazados y el aluminio puede asociarse a los sulfatos y formar hidroxi - sulfatos de Al.

Las plantas toman con mayor rapidez las reacciones del Al cuando los suelos son muy ácidos, los síntomas que muestra un planta al estar intoxicadas con Al son la reducción del crecimiento radicular en longitud y reduce su crecimiento. Las raíces afectadas por el estrés de aluminio debido a que sus raíces son pequeñas no alcanzan a tomar la cantidad necesaria de agua y nutrientes, el aluminio infiere en el transporte y utilización de los elementos nutritivos.

Se realizaron unos estudios en plantas, aplicándoles una solución de nutritiva con aluminio y no mostraron ningún síntoma en las hojas pero su afectación era en las raíces, las cuales hizo más cortas y gruesas.

La exposición del aluminio provoca la formación y depresión en la epidermis de los ápices radiculares y la formación de vacuolas en estas células se incrementa, se reduce su turgencia y se produce desordenes fitoplasmatocos en las células de la epidermis y de la periferia de los meristemas radiculares.

Existen criterios para considerar el aluminio como un problema en el suelo:

 Cuando se presenta en el suelo valores superiores a 2 Meq de Al

 Cuando el porcentaje de saturación de l en relación con los cationes intercambiables es mayor de 25.

 Si la relación Calcio- Magnesio y Potasio es menor o igual a 1.

Cuando aparece alguno de estos

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