MECANISMOS DE DEFENSA

MECANISMOS DE DEFENSA

Así como las plantas y los animales usan sus mecanismos para poder sobrevivir, el ser humano en muchas ocasiones en lugar de afrontar una frustración, un conflicto o culpabilidad, se engaña a si mismo distorsiona la realidad y se convence de que todo marcha bien.

A medida que progresa el desarrollo de la personalidad, el individuo aprende métodos que le permitan descargar sus impulsos y adaptarse a la realidad, reduciendo la ansiedad que las frustraciones y los conflictos pueden generar.

Cuando los problemas que nos agobian, son muy duros de enfrentar, tendemos a bloquearlos en nuestra mente para evitar sufrimiento y sentirnos mejor dada cada situación que se nos presente. Esas técnicas fueron llamadas Mecanismos de Defensa

Los mecanismos de defensa son generalmente utilizados por el ser humano para representar a través de estos las provocaciones del “yo” frente a imágenes, sentimientos o afectos intensos que nos causan dolor y que suelen ser de mal gusto, es decir en nuestra vida cotidiana los mecanismos de defensa sirven para crear una barrera de protección del yo frente a nuestros instintos e impulsos negativos.

Como mencionamos anteriormente los mecanismos imprescindibles para nuestro equilibrio psíquico porque nos ayudan a sortear las crisis y nos dan tiempo suficiente para resolver en parte nuestros problemas. Sin embargo el acudir continuamente a estos mecanismos no ayuda a que la persona madure y por lo mismo no van a llegar a su autorrealización, o a una vida plena.

Estos mecanismos nos permiten generalmente sobrellevar la ansiedad de la cual podemos referir tres tipos de esta: La ansiedad de la realidad, que es la que nace a partir de un peligro o problemas existentes; La ansiedad neurótica, que son aquellos impulsos que se salen de nuestras manos y nos lleva a cometer actos que son inaceptables para nosotros mismos y por último; La ansiedad moral, que se genera con la prevención de realizar o cometer actos que estén en contra de nuestros códigos morales.

Todo lo anterior mencionado da cabida a que el ser humano utiliza constantemente en su vida diaria estos mecanismos de defensa para tratar de asumir por decirlo así sus problemas a nivel emocional y de conductas, aunque en momentos no nos damos cuenta de el uso de estos mecanismos y en lo personal me parece que son validos por que se adhieren a situaciones de la vida cotidiana.

Hoy en día tenemos la certeza de que estos mecanismos de defensa son interesantes puesto que cada día que pasa estamos buscando protegernos de la realidad y tratar de evitar aspectos, emociones, experiencias o situaciones negativas y dolorosas procurando buscar un bienestar en nuestras vidas personales tanto interiormente como exteriormente.

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