Marie Curie. La Dama del Radio

Marie Curie.

La Dama del Radio.

01/04/2013

Andrea Guerrero Sarabia.

Índice.

Infancia y adolescencia……………………………………………...….3

El comienzo de un duro camino………………………………..………6

En París……………………………………………………………...………..7

De su vida personal……………………………………………………….8

Hablando de Pierre Curie………………………………………..……10

Matrimonio Curie……………………………………………………...….11

Familia Curie……………………………………..………………………..13

Ciencia Nupcial…………………………………………………………15

Tras la muerte de Pierre……………………..…………………………..18

El Instituto del Radio…………………………………………………….19

La Dama del Radio………………………………………………………21

Muerte de Marie Curie………………………………………………….23

Fuentes de consulta……………………………………………………..26

Madame Curie.

Infancia y adolescencia.

Marye nació en el seno de una familia de origen polaco dedicada al estudio y a la enseñanza en Varsovia (Polonia) el 7 de noviembre de 1867 (hace 146 años), fue la más pequeña de su familia, con el nombre de Marye Sklodowska; con cuatro hermanas y un hermano mayores. Su padre era profesor de física y matemáticas, además tenía un gimnasio de niños; su madre, maestra, pianista y cantante. Desde joven, Marye (adoptó posteriormente la forma francesa de su nombre: Marie) demostró una gran capacidad intelectual y un liderazgo positivo en su clase, con el que contagiaba entusiasmo por el trabajo y el estudio a todas sus compañeras.

La infancia de Marie no fue del todo feliz. La madre, enferma, evitaba besar para evitar el contagio, tanto a Marie como a sus otros cuatro hijos y, durante muchas horas al día, se encerraba en soledad acuciada por ataques de tos, muestra del debilitamiento que poco a poco iba minando su salud. Desde los primeros años escolares, Marie dio muestras de su capacidad intelectual, ocultándola a veces por decoro. Las muestras de su despierto intelecto pronto sorprendieron a los padres que, como pedagogos, entendían que a tan corta edad la pequeña debía jugar con muñecas y no abusar de lecturas que distorsionaran esa etapa de aprendizaje. Pero, de cuando en cuando, la sorprendían leyendo libros cuya lectura requería un esfuerzo no indicado para su edad.

La escuela privada en la que fue admitida no fue fácil para Marie, ya que tenía dos planes de estudio, el polaco y el oficial, que incluía materias aprobadas por los rusos y las alumnas simulaban estudiar cuando las visitaban los inspectores. La situación era muy estresante para Marie ya que, por ser muy aplicada, con frecuencia era escogida para recitar algún pasaje en ruso para el inspector en turno.

A los diez años, fue transferida a una escuela pública, donde sólo se hablaba en ruso. A pesar de los problemas, disfrutaba la escuela y, siguiendo el ejemplo de sus hermanos, era la primera de su clase.

Debido a sus sentimientos patriotas, el padre fue despedido de su trabajo por el supervisor escolar ruso. Tuvieron que tomar huéspedes y dar clases particulares en el departamento familiar para sobrevivir.

Para su padre, la educación era muy importante y Marie disfrutaba aprender. El profesor Skolodowski les leía a sus hijos los clásicos de la Literatura y les mostraba los aparatos que había usado para dar clases de Física, una materia eliminada por las autoridades rusas.

Marie se graduó a los 15 años con la medalla de oro, pero con mala salud, debido a la fatiga y los problemas nerviosos. Su papá decidió mandarla una temporada al campo, a casa de unos familiares, donde pudo montar a caballo, pescar y remar en un lago. Fue el único año sin preocupaciones que Marie Curie tuvo en su vida.

Fue siempre una gran estudiante. Después de terminar sus estudios de secundaria, quiso seguir formándose. Pero en aquella época, la Universidad de Varsovia no aceptaba mujeres. Lejos de resignarse, la joven entró a formar parte de la “Universidad Volante”, formada por personas (principalmente mujeres) que estudiaban de manera clandestina por las noches.

Cuatro sucesos desgraciados sacudieron el hogar de los Sklodowska. El primer sucedió en 1873, cuando el padre fue separado de su puesto de profesor, además del golpe moral, significó una importante reducción en los ingresos familiares. Por ello, se vieron obligados a alquilar el resto de las habitaciones que componían su hogar. Tres años más tarde, la segunda desdicha llegó cuando uno de los inquilinos de la pensión que dirigía la madre enferma de tifus, contagió a dos de las hermanas de Marie, Zosia y Bronia. Contra pronóstico, no es la madre la que trae la enfermedad que acaba con la vida de Zosia. Éste fue, sin duda, un duro golpe en la vida de toda la familia y, en especial, para Marie.

Bronia logró remontar las dolencias y acompañó y sirvió de apoyo el resto de su vida a Marie. El tercer suceso fue que a los nueve años, Marie sufrió la muerte de su hermana mayor, Sophie, quien falleció de tifus; el cuarto y último, que hizo tambalear a la familia, fue algo que a lo largo del tiempo se estaba anunciando: la muerte de la madre, acaecida en 1878. A pesar de todo ello, el padre logró mantener a flote a la familia y consiguió dar a su parentela buenos estudios.

Marie se graduó a los 15 años con la medalla de oro, pero con mala salud, debido a la fatiga y los problemas nerviosos. Su papá decidió mandarla una temporada al campo, a casa de unos familiares, donde pudo montar a caballo, pescar y remar en un lago. Fue el único año sin preocupaciones que Marie

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