ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

A unos centímetros


Enviado por   •  12 de Diciembre de 2019  •  Ensayos  •  981 Palabras (4 Páginas)  •  229 Visitas

Página 1 de 4

A unos centímetros.

Lo que veía esa noche al cerrar mis ojos era un color cálido, lo deliraba, me sentía perdida en un vacío, era algo que veía a través de mis sueños, se nublaba mi vista y todo se coloreaba en color azul. Era el color de su pelo. Era un simple color que estaba delirando una fría de madrugada.

 Una noche de octubre estaba en mi cama tratando de dormir pero solo contaba el tiempo, y el paso de los segundos era eterno, solo ansiaba  que se dieran las seis de la mañana. A esa hora tendría que levantarme ya que empezaría a arreglarme, ese día me vestiría de la mejor forma posible, solo pensaba en verme bien, acomodar mi cabello de lo más lindo que fuera, ponerme mi mejor perfume, y estar lista  para ir temprano tomar un autobús en dirección a Torreón.

Viajaría cuatro horas por la carretera. Ya lo había mentalizado. Pero ese día solo pensaba, que hare durante ese tiempo, el camino me parecerá eterno.

Este viaje lo realizaría para encontrarme por primera vez con una persona que había conocido por redes sociales, y la emoción era increíble, más que cuando fui a ver a mi cantante favorito en primera fila, más que cualquier otra cosa.

Durante meses platique con esa persona por mensajes en Facebook, después por Whats app, y por último llamadas que duraban hasta el amanecer.

Realmente no pude descansar nada antes de ir a la Central de Autobuses, esa misma noche además de estar contando el tiempo con ansias, mi mente no podía concentrarse en dormir, mi corazón solo se celebraba, latía tan fuerte que me dolía el pecho, sentía nervios, dolor en el estómago, ganas de vomitar, y el cuerpo me temblaba, jamás me sentí tan terrible físicamente, no podía ni levantarme.

Mis amigos estaban preocupados porque sabían lo que haría, no dejaban de preguntar “¿a qué hora sale el autobús?, ¿quieres que te acompañe?, ¿Estas segura de ir mañana?”.

Por alguna extraña razón mis padres estaban como sin nada, no sintieron preocupación ni angustia, y eso que ellos son de cuestionarme todo, tal vez solo pensaban en verme feliz, ya que antes había pasado algunos momentos tristes, a mi padre solo le preocupaba que se me fuera a hacer tarde, con eso de que me sentía mal en la madrugada, el solo gritaba desde su habitación “Ya duérmete o no alcanzaras el autobús”

En ese entonces trabajaba en el centro de Monterrey iba de tarde y de momento había dejado mis estudios entonces tuve bastante tiempo para charlar con esa persona, de un simple saludo paso a hablar antes de entrar cada quien a su trabajo y en la noche al llegar a mi casa, ya prestaba más atención al teléfono que a mi alrededor.

Algunas personas me comentaban la famosa frase de “amor de lejos felices los cuatro” otros me decían que quizás no sería la persona de las fotos y que tuviera cuidado porque podía ser una trampa, pero mi corazón dictaba que simplemente me atreviera; solo temía a que me dejaran plantada, quedarme ahí como tonta con mi mochila, sentada en la banca de la Central como un vagabundo y con hambre en una ciudad desconocida, ya que no llevaba dinero más que los boletos del transporte.

Todo el camino de mi casa a la central iba haciéndome muchas preguntas como estas ¿en persona le agradare?,  o  ¿y si llego tarde y se va?, el simple camino al centro se me hizo eterno, pero llego el momento en que aborde el autobús, estaba sentada cruzada de brazos con frio, y todo el cuerpo adolorido, con los ojos pesados de sueño y no dejaba de revisar mi celular a cada instante, para ver si me mandaba algún mensaje, pero no, no había nada y la pila casi se me agotaba cada vez mes sentía más angustiada y tan lejos de casa.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (5.4 Kb)   pdf (51.1 Kb)   docx (9 Kb)  
Leer 3 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com