AMERICA KAFKA

América de Karl, América de Hoy

América de Kafka parte de una problemática común y de todos los tiempos, la inmigración, que a partir de 1670 se empieza a presentar como un asunto de carácter masivo y familiar como consecuencia de crisis económicas que a través de toda la historia han afectado particularmente a Europa, o en búsqueda de mejores oportunidades de trabajo, o simplemente por huir desplazados por la violencia o atormentados por la calidad de vida que su país le ofrece. En este caso, Karl llega a New York presionado por su padres, por esto se habla que la inmigración tiene un carácter sumamente familiar; tras haber cometido un pequeño desliz con una sirvienta, lo que se concebía absurdo y más si fruto de su aventura había una vida de por medio.

Es una historia “que guarda una actitud crítica, dolorosa y alegre frente a la modernidad condenatoria. América”, dice Max Brod -amigo y biógrafo de Kafka. Muestra el mundo desconocido al que tiene que enfrentarse un joven que prácticamente fue desplazado de su tierra y de su parentela, y la rápida adaptación e integración a la que debe enfrentarse, costumbres, creencias, políticas, ideologías al llegar a América. Eso mismo sucede hoy, las circunstancias y el contexto o el entorno nos obligan a tener inesperados comportamientos que se van descubriendo con el tiempo, responsabilidad, libertad, soledad, etc.

El desplazamiento de Karl muestra de cierta manera que prevalecen los intereses particulares sobre la autonomía de cada persona, Karl, lo que usualmente llamaríamos jerarquías de poder, o abuso del poder. Además se ven temas como la humillación, y por qué no algo de religión en todo esto, por la manera como se castigo a Karl por desarrollar su sexualidad, problemas nada alejados de lo que vivimos hoy, sometimiento por parte de gobernante con la excusa de un buen empleo, una vivienda, el poder y control que la religión ejerce en el comportamiento de la sociedad.

Otro tema importante y sin lugar a dudas que más aqueja la sociedad actual , es el trabajo, la posibilidad de tener un empleo al menos para sobrevivir solamente, Karl se empeñaba en adaptarse a la situación sin importarle el sometimiento que debía pasar, con tal de sentirse tranquilo cumpliendo su deber. Estas conductas parecen correctas pues se lucha por algo que se quiere, por una casa, por un ascenso, por mejorar la calidad de vida y pensamos que está bien pero simplemente estamos haciendo parte de un sistema. Karl como cualquier migrante tuvo que someterse a la subordinación y explotación, tener que sobrevivir, callar, obedecer y relacionarse como única opción a sus jefes que a cambio le ofrecen una hipócrita amistad. Karl llega a adaptar una condición de servidumbre de la que no puede escapar pues no tiene más opción y de la cual tampoco los demás quieren verlo salir.

La estadía de Karl

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