Donde Estara Mi Primavera

Carlos Martini analiza a los personajes de su novela Dónde estará mi primavera, a quienes define como seres solitarios, fracasados y con pasados turbulentos. "Sus vidas son un reflejo del mundo actual", dice.

Por Rosalía CiciolliDespués de la experiencia de lanzar su primera novela titulada Dónde estará mi primavera, el sociólogo Carlos Martini analiza en primera persona a los atribulados personajes que se encargó de dar vida en su libro. Asegura que ellos encierran un inconsciente reprimido y una doble personalidad que, en algunos casos, llega a niveles patológicos y que los empuja a ser profundamente incongruentes y conflictivos. En primer término se refirió al personaje central de la historia, Daniel Hernández, un ser perturbado por la culpa, tras la muerte de su hija Beatriz en un accidente automovilístico y del suicidio de su esposa. "Daniel jamás logró superar el trauma de esta doble pérdida en su vida, primero porque su esposa lo responsabilizó de la muerte de la hija de ambos, al manejar el auto alcoholizado, y en segundo lugar, por el suicidio de esta", explica. Ante el vacío que era su existencia tras esas muertes y la indiferencia de su hijo, Enrique, Daniel busca la forma de expiar sus culpas y de tranquilizar su conciencia ante el desamor, las constantes infidelidades y una convivencia matrimonial forzada. Tras encontrar el cuerpo de Elena, su mujer, ensangrentado, Daniel descubre una carta que ella le dejó y que tarda cinco años en leer, por temor a las confesiones que podría encontrar en el papel. "Entonces, Daniel se disloca y comienza a escribirse lo que, en el fondo, quería reprocharse a sí mismo y no se atrevía", explica Martini. Es así que el personaje central de la historia recurre a otro personaje, Verónica -que en la novela es una chica que trabaja en una mueblería- que le escribe cartas, primero de reproche hacia su pasado nebuloso y que luego, de a poco, van dibujando palabras de compresión ante sus culpas. LADO OSCURO. Martini esbozó también una explicación al interrogante que salta tras la lectura de Dónde estará mi primavera, cuyos personajes muestran personalidades con conductas sexuales reprimidas, que rozan lo patológico. "Para mí, cada ser humano sobrelleva un inconsciente reprimido y de profunda doble moral", subrayó.Eso explica para el autor, que en la novela convivan un esposo infiel, que es capaz de tener varias amantes y a la vez experimentar con un travesti, o de una esposa amada al principio de la relación, que luego es engañada y, a la vez, engaña a su marido, y de los otros personajes, todos con una vida sexual oscura y llena de sorpresas. "En prácticamente todos esos personajes, las conductas sexuales adquieren niveles patológicos, incluyendo a dos sacerdotes que aparecen en la novela; uno de ellos es un pedófilo reprimido, que con el pretexto de enseñar a los chicos les pasaba el brazo en el hombro, y el otro es un reprimido sexual, que luego termina siendo un alcohólico que recorre prostíbulos en Ciudad del Este", explicó. Martini considera que detrás de la superficie que muestra cada ser humano, se esconden ríos subterráneos que se mueven de manera muy intensa y que reflejan una profunda hipocresía social. "Escondemos mucho más de lo que mostramos, entonces probablemente lo que nosotros vemos en nuestra sociedad es lo que podríamos llamar una pantalla, detrás se esconden realidades muy profundas y oscuras", señaló. CONTRADICCIONES. Martini señaló que la atribulada personalidad de su personaje central, Daniel Hernández, es un aspecto que analizó por varios años, antes de concluir el final del libro. Daniel afirmaba que amó profundamente a su esposa, aunque durante los años que llevaron casados no paró de engañarla y humillarla, hasta terminar acostándose con la mejor amiga de esta. "Considero que esa es una de las grandes contradicciones

...