Educaciòn en lengua de señas

Hay muchas cualidades que otros seres vivos poseen que los humanos no tenemos y a causa de estas “carencias” no se nos considera enfermos. Es así que la audición en una carencia de muchos humanos, pero…

¿La sordera es pues una enfermedad?

• Un niño sordo puede ser completamente aceptado, estimado y querido si se le mira no como un enfermo, sino como alguien que tiene la condición de no oír. Simplemente, tiene una capacidad menos, así como nosotros (oyentes) carecemos de la capacidad de volar, y esto va a condicionar que su mundo se organice de una manera diferente, lo cual no quiere decir necesariamente de una manera limitada.

“La detección y diagnóstico de un bebé sordo es, para cualquier padre que no sea sordo, un proceso inesperado y difícil por la sencilla razón de que todos esperamos hijos parecidos a nosotros, en el mejor sentido”.

La complejidad a la que se enfrenta la familia de un niño sordo, va más allá de simplemente aceptar una condición diferente, pues afrontar un mundo desconocido que no ha sido elegido, llega a generar angustia. Vivimos en una sociedad sumamente intolerante que al notar diferencias tilda erróneamente, esto porque la tradición ha encajado dentro de su gran lista de enfermedades a la sordera, en lugar de verla desde la realidad como una condición irreversible a la que podemos adaptarnos felizmente.

EL PROBLEMA DIAGNÓSTICO

♫La sordera del “sordomudo”, generalmente se origina por una alteración, bien sea por una enfermedad o un desorden congénito, que afectó al bebé antes o después de su nacimiento y antes de aprender a hablar, o por cualquier afectación que estropeó los órganos que permiten oír; ante lo anterior, debemos considerar que una vez dañada la audición, el daño es irreversible.

¿Cómo llegamos a darnos cuenta de que un bebé es sordo?

La condición de sordera puede pasar inadvertida cuando el bebé es muy pequeño o se puede confundir debido a no mostrar una marca “visible”, pues la evidencia de la sordera es la mudez.

1. Posibles causas:

► Virosis durante la gestación

► Meningitis

► Antecedentes familiares

► Malformaciones de los órganos, entre otros.

1. Evaluación diagnóstico:

◄ Respuestas a la voz a intensidades normales.

El estímulo y la respuesta de un niño sordo, debe ser progresivo, si hay sospecha de sordera ante los sonidos producidos y la identificación del llamado debe ser referido a un experto en la materia para los seguimientos pertinentes.

LA ATENCIÓN REQUERIDA: El niño sordo requiere un “entorno Lingüístico de Señas” es decir un ambiente en el que se utilice como idioma principal una lengua visual. Recordemos que el primer idioma lo aprendemos de quienes nos rodean siempre y cuando podamos tener acceso a él.

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