Fantasma De Canterville Y Otros Cuentos

El Fantasma de Canterville y otros cuentos.

En nuestra vida seguramente nos hemos deleitado con alguna de obra. Muchos tuvimos una infancia llena de fantasía y seguridad; los cuentos formaban parte de ella, pues es donde podíamos imaginar y desear lo imposible -aunque algunos lo seguimos haciendo.

Es imposible hablar de cuentos cuando no se conoce a Oscar Wilde. Es uno de los mayores dramaturgos que el mundo nos ha dado.

El estilo de Wilde es incomparable, y no solo por hablar de su forma de narrar, pues combina los elementos necesarios de cualquier cultura para formar una gran obra. Desde una familia muy burguesa hasta una familia demasiado capitalista, los cuentos de Wilde nos regalan a los personajes ideales para una gran historia, que colma nuestro deleite con un poco de gracia.

Hoy hablaremos especialmente de Oscar Wilde, y especialmente, de tres cuentos suyos recopilados en “El Fantasma de Canterville y otros cuentos” que ofrece la biblioteca de Norma en la coleccion CaraCruz.

En esta pequeña colección encontraremos una selección de obras clásicas de la literatura l, desde Robert L. Stevensson hasta el querido Ignacio Manuel Altamirano. Aunque sólo se hablará de esta pequeña colección de Oscar Wilde, debo invitar a los niños interesados en buena literatura para buscar en esta colección.

El libro comprende tres cuentos de Oscar Wilde y algunos poemas en prosa escritos por él. Los cuentos: El Fantasma de Canterville, El crimen de Lord Arthur Savile y El cumpleaños de la infanta; comprenden este libro.

El primer cuento, “EL crimen de Lord Arthur Savile”, nos habla sobre un personaje muy peculiar, quien es Lord Arthur, un apuesto y joven Lord londinense, quien esta apunto de casarse con Sybil Merton.

En una fiesta que ofrecía Lady Windermere, conoció a un quiromántico que llegó a ser la atracción principal de la fiesta, pues todos esperaban ansiosos saber lo que les deparaba. Lord Arthur vivía en medio de una gran felicidad, aunque este sería el inicio de una historia llena de presión. El quiromántico no dijo lo que en realidad había visto en la mano de Arthur, aunque al final terminaría diciendoselo personalmente: “Un asesinato”

Lord Arthur debía hacerlo para poder vivir feliz con Sybil. Así que pensó en aplazar la boda hasta que el asesinato fuera cometido. Aunque debía pensar bien a quien matar y optó por asesinar a Lady Clem de una forma atroz: envenenamiento.

Y así fue, Lord Arthur envenenó a la anciana, quien murió de causas naturales y no por los tóxicos. Así que tuvo que aplazar de nuevo la boda para intentar asesinar al deán de Chichester, quién sobrevivió a la bomba que nunca explotó.Al borde de una gran depresión, todo sucedió

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