LA MORAL COMO VALOR POLICIAL
JOARLOAL05Documentos de Investigación16 de Julio de 2021
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LA MORAL COMO VALOR POLICIAL[pic 1]
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TRABAJO QUE COMO PARTE DEL CURSO QUE PRESENTA EL ALUMNO:
ARMANDO LOZANO ALVARADO
TEMA:
LA MORAL COMO VALOR POLICIAL
Chiclayo, 13 de julio de 2021
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN
La moral se encarga de establecer las normas y criterios que debemos utilizar cuando calificamos determinadas acciones como correctas o incorrectas, buenas o mala, su misión es definir las normas y criterios que deben regir las relaciones entre los miembros de una familia, una pareja, o miembros que conforman estado, También es el punto de partida de la reflexión crítica que la ética realiza.
Estos códigos morales pueden servir de referencia a instituciones, grupos y sociedades enteras, impregnando procesos esenciales de socialización y de pautas de actuación
Las conductas de los policías no pueden reducirse solamente a cumplir las exigencias legales. Eso no basta, también deben aspirar a cumplir con imperativos propios de un Estado Democrático de Derecho. De esta forma, es preciso aspirar a la legitimidad social. La ética social es el fundamento de la ética policial y de una moderna deontología profesional. La función ética y moral de los policías se sustenta precisamente en el respeto de la dignidad y los derechos humanos. En consecuencia, no es una materia anexa a los procesos formativos de los organismos encargados de hacer cumplir la ley, sino que es el pilar ontológico y deontológico base sobre la cual se construye una identidad social acorde con la dimensión de servicio público, tan propia de la función policial. En consecuencia, la ética policial no busca transformarse en una “ética y moral utilitarista”.
- LA CONCIENCIA MORAL
Conjunto de reglas de comportamiento, normas de convivencia y de conducta humana que determina las obligaciones de los policías, y de sus relaciones entre sí y con la sociedad.
La conciencia moral es esa voz interior que nos obliga a actuar de una forma y también nos dice si son correctas o no nuestras acciones. Es la capacidad de juzgar no solo nuestras acciones, sino también las de los demás, como buenas o malas
Para determinar la noción de la conciencia moral, acudiremos una vez más a nuestra propia experiencia.
- Es un hecho que nadie de nosotros juzga las acciones de un vegetal o de un animal irracional como acciones morales o inmorales. Sólo un ser humano es sujeto de actos morales o inmorales. Podemos por tanto, concluir que "la conciencia moral es una función de la persona humana".
- La experiencia nos enseña que ciertas personas observan una determinada conducta moral y que otras se conducen de forma inmoral. En consecuencia "la conciencia moral no es algo añadido a la persona, sino que es la misma persona, el sujeto de la conducta moral". "La conciencia moral es una realidad dinámica que capacita al hombre para captar y vivir los valores morales". Su desarrollo y perfección dependen del desarrollo y de la perfección de la personalidad de cada hombre.
- LA CONCIENCIA MORAL INTERIOR DE LA MORALIDAD
Reflexionar sobre la conciencia moral constituye un camino a la comprensión sobre la excelencia de la persona humana, a entender la razón por la cual estamos llamados y dotados a la perfección y a hacer el bien, estando en cada uno de nosotros el saber aprovecharlo en virtud de nuestra libertad.
“La conciencia dice a cada uno lo que debe hacer”; esta aseveración, por lo simple que parece ser, puede conducir a error. La conciencia moral es la capacidad de reflexión del ser humano sobre aquello que es correcto en relación con el obrar. En consecuencia, se relaciona de manera directa con la ética; puesto que, la ética reflexiona acerca de la bondad o maldad de nuestros actos.
La conciencia admite grados diversos de sensibilidad, pudiendo perfeccionarse o deteriorase. El exceso es la escrupulosidad y el defecto es la laxitud, ambas expresión de una insana conciencia.
El escrupuloso es quien actúa con duda, el inseguro, el que actúa con extremo recelo en el cumplimiento del deber. La conciencia escrupulosa se presenta usualmente en culturas donde el centro de la formación no se pone en la virtud (que es positiva e invita al crecimiento personal), sino en el deber, el que sin ser perjudicial debe estar en un segundo plano. Un ejemplo, el señor Perry, padre de Neil, en la película La sociedad de los poetas muertos, quien con una personalidad insegura y autoritaria motiva el suicidio de su hijo.
También es una enfermedad tener una conciencia insensible que no capta la existencia del mal donde si existe. Estimar todo como bueno y lícito es carecer de un sentimiento de culpabilidad (un comportamiento que se opone al propio ser y se percibe como fuera de la realidad), lo cual sería representativo de una conciencia Laxa.
Entonces el sano, frente a un acto moralmente malo, presenta un sentimiento de culpabilidad y manifiesta arrepentimiento, el cual no es puramente racional, sino también emocional, como una especie de dolor por haber actuado injustamente. El resultado de esta incongruencia es el remordimiento de conciencia y el paso siguiente el arrepentimiento, el que nos debe llevar, siempre que sea posible, a reparar el daño causado con el propósito de rectificar y recuperar la armonía interior.
- LA SANCIÓN MORAL
La sanción moral consiste en la desaprobación o castigo que merece el incumplimiento o la violación del deber. Esta desaprobación puede recaer en una persona natural o jurídica, en una entidad estatal, en una oenegé o en una entidad pública.
La sanción moral es una poderosa arma que, bien usada por la sociedad, puede disuadir a una persona natural o jurídica de cometer actos delictivos o que atenten contra el bien común. Percibida en esta forma, la sanción moral tiene un valor positivo y es un concepto que debe fortalecerse para evitar desmanes y conductas reprochables contra el ordenamiento jurídico y contra la sociedad.
- ELEMENTOS CONSTITUTIVOS DE LA CONCIENCIA MORAL
Los juicios previos al acto moral establecen los principios. Por ejemplo: Hay que hacer el bien y evitar el mal. En otras palabras, se juzga que, si tal acto es bueno, debe ser realizado; si es malo, debe ser evitado. Los juicios después del acto.
Es razonable pensar que el acto moral se corrompe o debilita en su esencia cuando la relación entre sus elementos constitutivos se modifica. Así ocurre, por ejemplo, cuando el sujeto coloca por encima del fin las circunstancias al decidir sus fines en función de las circunstancias que lo rodean, pues con ello, su querer ya no es resultado no de su conciencia moral, sino de algo externo y ajeno a él. En este caso parece que son las circunstancias las que "lo obligan" a imponerse tal o cual fin y, por virtud de ello, llevar a cabo tales o cuales acciones.
Cuando ocurre que la elección del fin por parte del sujeto queda supeditada a las circunstancias, la voluntad se restringe. Así el acto moral pierde su característica primordial, ser voluntario, libre. Por ello, bien puede decirse que el sujeto que renuncia a su fin por virtud de las circunstancias, ha muerto moralmente. Caso contrario ocurre con el personaje que será fusilado en este hermoso cuadro del pintor español Francisco de Goya.
Por las circunstancias representadas en esta hermosa pintura, podemos suponer que el personaje eligió como fin último de su vida luchar por la libertad de su pueblo esclavo, por esta razón es capaz de enfrentar con valor y en paz la muerte por fusilamiento, resultado de la decisión de rebelarse. De no haber actuado con esa libertad, es decir, de haber asumido las circunstancias como la fuente de sus decisiones; simplemente habría intentado ser un buen esclavo, evitar a toda costa los castigos que su amo pudiera infringirle. Pero de tomar esta decisión, sus expectativas no podrían ser otras que vivir como esclavo toda su vida, al capricho de su amo. Sin embargo, el personaje del cuadro decidió no ser "esclavo de las circunstancias"; sino enfrentarse a ellas al imponerse a sí mismo como fin último de su existencia la lucha por la libertad de su pueblo.
La libertad del acto moral está fundada, pues, en la capacidad que el ser humano tiene de imponerse a sí mismo fines que pretende alcanzar por encima y a pesar de las circunstancias que lo rodean, aún a costa de su vida. Pero, hoy en día ésta no es ya una postura vigente.
- ELEMENTOS RACIONALES QUE CONCURREN A LA FORMACIÓN DE LOS JUICIOS
Los juicios son formulados antes y después del acto moral. Los juicios previos al acto moral establecen losc principios. Por ejemplo: Hay que hacer el bien y evitar el mal. En otras palabras, se juzga que, si tal acto es bueno, debe ser realizado; si es malo, debe ser evitado. Los juicios después del acto. Una vez realizado el acto, la conciencia lo acepta si fue bueno y lo rechaza en el caso de que haya sido malo. La conciencia juzga también si el acto fue digno de recompensa o de castigo. Si fue malo se pronuncia sobre la obligación de reparar los males causados.
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