Arquitectura y muerte

El ser humano tiene la capacidad de gozar de las emociones que son reacciones que todos experimentamos; como la felicidad, el orgullo, la satisfacción, el enojo, la confusión, la tristeza, entre muchas otras. Todas estas emociones le generan al cuerpo una sensación muy distinta que se provoca por todo lo que está sucediendo a nuestro alrededor, nuestros sentidos son los que nos permiten experimentar todo esto, puede ser estimulado por la vista, como cuando llegas a tu primer día de clases en una nueva escuela y de primera impresión vez todo muy distinto a lo que esperabas, te empiezas a sentir angustiado y a lo mejor un poco decepcionado,  pero de repente escuchas una voz lejana, te parece muy conocida, le prestas atención y si, es de una de tus amigas mas queridas y las emociones dan un giro espectacular… Todo esto es gracias a nuestros sentidos, que nos permiten percibir las sensaciones que el exterior nos puede provocar.

La Arquitectura es el arte de diseñar espacios que cumplan y satisfagan las necesidades de quienes ahí habitan, es crear un espacio confortable que vaya de acuerdo con el objetivo para el que lo utilizaran, de ahí la importancia de diseñar espacios con un fin. La creación de un inmueble es muy curiosa y lleva todo un proceso, muchas veces nosotros como arquitectos nos queremos saltar a diseñar dejando de lado la importancia de ver las necesidades de los usuarios, pero que pasa si los colores, las formas, los espacios, la ventilación, la iluminación están mal ubicados o no cumplen con el objetivo de dicho espacio, ¿qué sensaciones causaría? ¿estamos tomando en cuenta el impacto que la arquitectura causa dentro de nuestra vida cotidiana?

En el momento en que comenzamos a proyectar ideas nos volvemos seres creativos, comenzamos a plasmar todo aquello que se nos viene a la mente, sea muy conveniente o no tanto, sacamos todo eso que nuestra mente va produciendo e imaginando, sin embargo, muchas veces no se llega al resultado mas optimo. Actualmente en épocas de pandemia nos pudimos dar cuenta de una infinidad de necesidades que tenemos dentro de nuestro hogar, de todas aquellas cosas que no notamos hasta que pasamos un tiempo mucho mas prolongado en dicho espacio y esto puede ser un contraste enorme, afortunados aquellos que siempre tuvieron la facilidad de encontrar o crear un espacio que fuera más confortable, pero que pasa con todas aquellas personas que no pudieron, que jamás se sintieron cómodas en el espacio en el que tenían que pasar tiempos largos ahí, era muy común escuchar que la gente estaba harta, que no se sentía cómoda y bueno, llevémoslo al caso mas extremo en donde pudieses entrar en una gran depresión sea por las razones que sean y que lejos de estar cómodo y sentirte pleno en tu propio hogar, lo único que te propicie estar ahí es crearte aun mas ansiedad y tristeza, porque tu recamara en lugar de tener ventilación natural estaba tapada por un gran árbol que siempre te daba sombra y los únicos tonos que veías eran grises y oscuros, porque en el espacio en donde trabajabas había mucho ruido porque tenias una fabrica al lado y así nos podemos seguir con mil ejemplos que nos podrían llevar a escenarios tan feos como la muerte, suena muy fuerte decir que la arquitectura mal empleada puede llevarnos a dichos extremos pero es cierto, seamos conscientes de que el espacio en donde estas día con día afecta en tus emociones, modifica tus sensaciones y te puede llevar a situaciones desfavorables.

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