¿CONOCEMOS LA LIBERTAD?

E.T.P María Auxiliadora                                                                     24-11-2020

4to año de salud                                                                          Aparicia Fuentes

Keiber Quintana

¿CONOCEMOS LA LIBERTAD?

     Todos hemos tenido la idea inequívoca de lo que la libertad significa, creíamos que la libertad conlleva al coloquialmente hablado ≪hacer lo que nos da la gana≫ que podemos ir y venir sin que nadie nos pregunte nada, despegarnos de las obligaciones solo porque queremos.  Este concepto debe ser erradicado y lo primero a tomar en cuenta es que nadie gozar de una libertad absoluta, en el sentido de poder abstraerse por completo de normas, leyes y valores para actuar.      

    La libertad real es tener la oportunidad decidir lo que es mejor para uno mismo basándonos en lo que creemos correcto, es la facultad que poseemos para actuar en las diferentes situaciones de la vida según nuestros derechos y nuestra propia voluntad.  Bien dice San Agustín "La verdadera libertad no consiste en hacer lo que nos da la gana, sino en hacer lo que tenemos que hacer, porque nos da la gana."

       Lo que quiere decir este hombre es que realizaremos nuestras actividades porque queremos, que aunque tengamos la opción de declinar lo haremos porque nuestra moralidad y nuestros valores nos indican que debemos realizarlo.

      No es libre aquel que simplemente hace lo que le da la gana. Libre es aquel que dibuja y construye su camino decidiendo el cómo, por dónde y con quien lo recorrerá, el que elige lo que le hace crecer a pesar que en ese momento no le apetezca hacerlo. Todo esto sin dejarse influenciar por otras personas de su alrededor.^[1]

Pero ser libre no solo te da beneficios sino que también implica correr riesgos y asumir responsabilidades, ya que cuando somos libres también somos responsables de nuestras decisiones, porque somos nosotros quienes elegimos y tenemos que asumir todo lo bueno y lo malo que nuestra decisión conlleva.

       Porque libertad no estaría completa si no nos damos el permiso, la libertad de equivocarnos. Más allá de fallar y volverlo a intentar, gocemos el decir que estamos equivocados, permitiéndonos elegir el camino que vemos correcto sin afectar el camino de otros.

     Ya que una de las grandes limitaciones de la libertad es la convivencia con otras libertades, valores y ética. Cada persona se rige por valores y culturas diferentes y  el respetarlo es ley si queremos ejercer nuestro derecho de libertad, de allí proviene la frase mi libertad comienza donde termina la del otro. Somos libres en un espacio limitado por nuestros propios valores y las leyes, en algunos casos las leyes serán más restrictivas que nuestros valores personales y en otros casos no.

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