Categorías Filosóficas

Hablar de categorías filosóficas, será indagar en todas las palabras, frases y hasta autores que tengan una relación intima con la filosofía como tal, reconociendo aportes por ejemplo, de algunas corrientes o un problema filosófico como tal. Principalmente, es necesario recordar los aportes categóricos de Aristóteles en el Órganon, donde de manera ingeniosa se conoce la primera clasificación de palabras, situaciones y valor de algo o alguien, todo esto como categoría. En este mismo orden de ideas, y apoyándose en los aportes de José Ferrater Mora, existe una variedad de palabras, que tan rica como la lengua española, aún más es la lengua griega, fuente de casi todas las palabras de los idiomas modernos y que cada una de ellas, es presta a un juego de palabras que permite el análisis, decodificación y amplio uso de los términos.

Aunado a ello, también existe la posibilidad de categorizar una palabra contextualizándola en el mundo de la filosofía, de modo que la filosofía actuaría como un filtro racional, puro y minucioso en la intención de comprender la función, el qué y por qué de un ente. En este sentido, se reconoce la admiración, que en palabras de Rafaela Diario Castellanos es, "una súbita sorpresa del alma, que hace que sea llevada a considerar con atención los objetos que le parecen más raros y extraordinarios", de modo que la admiración puede ser considerada una actitud, de aprecio, asombro y sorpresa ante lo inesperado o lo nuevo para los sentidos del ser humano, es así como Platón y Aristóteles le suman un gran valor, considerando que la misma es la actitud inicial para desarrollar el saber filosófico, pues al reconocer y sorprenderse por los aportes de otra persona, la admiración bien canalizada y racional, incita al desarrollo de habilidad que quieran alcanzar lo que en ese momento se considera majestuoso o asombroso.

Por su parte, se debe reconocer que la misma pertenece a la lista de las seis paciones primitivas del ser, lo cual desde un punto de vista personal está relacionada con la habilidad del alma por reconocer lo bueno, lo bello de un ente, ya sea otro sentimiento o simplemente un objeto, sin embargo, la admiración sufre de un proceso metódico que le permite desarrollarse, pues atraviesa tres fases que alcanzan un resultado. Según Ferrater Mora, al hombre sentirse admirado por algo, desarrolla un espasmo, una fijación o sorpresa indescriptible que invita al hombre a mirar y detenerse, pasando al segundo paso que es la sorpresa, es acá donde se puede apreciar detenidamente las características del objeto aprehendido y finalmente la admiración como tal, que es el clímax del momento como el poder del alma por apreciar de manera genuina y poco egoísta, un elemento que es ajeno a sí mismo.

Es importante reconocer, que la admiración en la categorización del lenguaje, está relacionada con la sorpresa, la capacidad del hombre de conocer y alcanzar cosas e ideas nuevas, y como base para desarrollar otras actitudes intrínsecas del ser, tales como el amor, la amistad y el respeto, pues de manera jerárquica principalmente el hombre tuvo la necesidad de observar en otra persona y objeto, una serie de características que le permitieran desplegar sentimientos racionales como la admiración. Sin embargo, tal como lo señala Ferrater Mora, “La admiración puede ser muy útil, al permitirnos aprender y retener cosas antes ignoradas, pero llevada a la exageración puede ser perniciosa y pervertir el uso de la razón”, esto da paso a lo que la tendencia cristiana reconoce como sentimientos vánales y alcanzar el rango más bajo del hombre, tal como seria el hecho de envidiar o codiciar dotes ajenos, lo cual sería una malformación o una antítesis de la esencia de la admiración.

Por otra parte, existe una categoría filosófica descrita por Ferrater Mora, que es el amor, donde de manera automática posee la capacidad de envolverse en un estado anímico de tranquilidad y entrega, de modo que el mismo al ser descrito desprende una esencia poética tal como lo describe el autor. Al hablar del amor, sería limitar las palabras pues el amar es un todo que desde una perspectiva filosófica ha sido considerada un elemento fundamental, desde la poesía es la inspiración y desde una perspectiva religiosa es el inicio de un todo, tal como una deidad. A lo largo de los años y del desarrollo de la filosofía, el amor se conoce en diferentes sentidos, como entrega, caridad, comprensión y el simple hecho de amar algo o alguien, sin embargo existen diferentes tipos de amor, clasificaciones

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