Conciencia moral

Se puede definir moral como las reglas por las que se rige el comportamiento humano dentro de la sociedad. Los seres humanos son morales ya que tienen la capacidad de elegir y son conscientes  de que sus acciones traen consecuencias. La conciencia de las consecuencias que traen los actos es la base del aspecto interno de la moral, en esto está el origen de la valoración de nuestro actos, hábitos y modo de vida. La conciencia moral se basa en la libertad que tiene el individuo de poder elegir y la conciencia de que no todas las alternativas a elección generaran la misma respuesta.

La libertad es un valor y un derecho de las personas, este derecho se traduce en la autodeterminación, la capacidad de elegir y discernir entre una acción y otra sin la intervención de terceros, asumiendo la responsabilidad de las consecuencias de dicha acción. Sin embargo la libertad se ejerce dentro de condiciones y limites, al vivir en sociedad nuestras acciones tienen una repercusión en el resto de los individuos, por lo tanto no podemos disponer de nuestra libertad con completa indiferencia hacia los demás y debemos comprender que nuestra libertad no puede pasar a llevar a otros seres humanos.

La conciencia moral y la libertad están estrechamente ligadas ya que las dos se basan en la capacidad de elección que poseemos. No obstante la libertad está regida por la conciencia moral, puesto que cuando tomamos una decisión dentro de nuestras propias libertades lo hacemos distinguiendo las repercusiones de esta y dándonos cuenta si esta acción es buena o mala. Acá juega un rol importante la autonomía que se relaciona con ser capaz de analizar lo que creemos que debemos hacer o evaluar si de verdad debe hacerse, somos autónomos cuando utilizamos nuestra conciencia moral y la conciencia nos lleva a la responsabilidad. Solo cuando somos libres y autónomos, es decir cuando nos damos cuenta de las consecuencias de nuestras acciones somos responsables.

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