ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

El Genio Maligno De La Duda, Por Descartes


Enviado por   •  21 de Enero de 2014  •  590 Palabras (3 Páginas)  •  319 Visitas

Página 1 de 3

Al llegar a este mundo, desde que nacemos, creemos en lo que vemos, en lo que sentimos, en lo que nos dicen los demás, (al menos las personas más cercanas a nosotros), considerándolo así nuestra realidad, en esta tierna juventud no tenemos nada de escepticismo, cuando vamos creciendo tendemos por lo tanto a conocer más cosas, ya que estando al alcance del conocimiento y con la mente llena de preguntas, es predecible que comencemos a cuestionarnos cosas, comenzar a dudar de la realidad es algo normal, puesto que nadie garantiza que sea precisamente eso: real.

Descartes dudaba de todo cuanto había, diciendo entonces que nada era como parecía ser, ya que no existía prueba de ello, y al haberla, está sería considerada la máxima verdad. Él creo al genio maligno, cuya función consistía en ayudarlo a saber que todo puede ser mentira, que de todo podemos dudar, que lo que vemos, puede ser inseguro y que por lo tanto nuestros sentidos no son confiables de ninguna forma, fue llamado así para que no fuese confundido por el Dios de los cristianos, ya que el suyo era el Dios que nos mentía al hacernos creer que sabíamos algo y burlarse de nosotros al vernos descubrir que no eran más que fantasías. Claramente eh experimentado la desagradable sensación de dudar de lo que soy y veo, siento que de alguna manera el genio maligno visita a cada persona en un punto clave de su paso por la tierra, un punto por el cual ya crucé, sintiéndome desorientada, el genio maligno me hizo entender que el escepticismo no es una filosofía tan descabellada, pues al principio puedes decir; claro que existe todo lo que veo, sino ¿por qué lo he de ver?, pero al saber y conocer por ejemplo la teoría de los colores de newton, cuyo fundamento está basado en que los colores no existen, sino que estos dependen del tipo de luz que cae sobre ellos, del pigmento que los cubre y de nuestra propia percepción, basada en la respuesta biológica de las células receptoras del ojo humano, nos podremos dar cuenta de que literalmente nada es como lo pintan, sé que este no es el único ejemplo, así que mejor es dudar de todo lo que hay, por lo menos yo considero que hay muchas cosas que no vemos y sin embargo existen, u otras que vemos distorsionadas, e incluso las que ni siquiera logramos vislumbrar. Nuestra realidad puede no ser cierta, no ser como la perciben nuestros deficientes sentidos, pero también siento que por algo nos fueron dados deficientes, quizá sea mejor, tal vez si tenemos algo de mejor calidad no lo apreciemos, así que no tiene caso, lo que logremos ver, será para nosotros nuestra realidad, siempre, porque será lo que tengamos a nuestro alcance, quizá hayan muchas cosas más, pero mientras no sepamos de ellas, es como si estas no estuvieran destinadas para nosotros, así que porque mortificarnos con certezas que no quieren asomarse a nuestros sentidos, realmente creo en lo que dice descartes de que, “si pienso, por ende luego existo”,

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (3 Kb)
Leer 2 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com