JOSE MARIA CALVO

J M Calvo Manifiesta que la filosofía de la educación nos permite perseguir y optimizar los objetivos de la educación.

A través de la misma los alumnos pueden aprender a desplegar nuevas vías de alcanzar el conocimiento, por elaboración propia, y no ser solo repetidores de los conocimientos que les dieron sus educadores. Establece que el estudiante, como centro de su propia educación, es capaz de desarrollar el pensamiento crítico y creativo. El estudiante, en continua búsqueda de la verdad, llega a aprender aquella verdad que es significativa para él, la verdad que da sentido a su vida. El conocimiento, así, se concibe como un proceso activo, dinámico, vivo, de búsqueda continua, construido dentro de la comunidad del aula en diálogo.

Incluir la filosofía de la educación como vehículo para alcanzar nuevas perspectivas se hace primordial, dada la fuerte necesidad que existe hoy en día de preparar alumnos que piensen y sean críticos, autónomos, responsables y no alumnos que lo único que hagan sea repetir

Los educadores son el bastión principal en cuanto a la responsabilidad de generar cambios en la educación.

Es necesario que la educación deje de ser adoctrinadora, que deje de ser unidimensional y limitadora del pensamiento.

Calvo utiliza una frase para definir lo anterior “¿estamos preparando esclavos para el mercado?”.

Afirma que el criterio de la Escuela debe ser la racionalidad debido a que tenemos que generar una escuela que permita a quienes se forman que apliquen la razón en cada acción de sus vidas es necesario formar “seres pensantes”, capaces de utilizar su propio criterio al momento de manifestarse y accionar en el diario vivir.

Plantea que es necesaria una reorganización, propone un cambio que llega hasta la distribución del mapa de la clase, plantea un cambio profundo que abarca también las evaluaciones que involucren a los alumnos en sus propias evaluaciones, y de esta manera llegar a una persona autocritica y de poder autoevaluarse

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