Karl Marx

UNIVERSIDAD NACIONAL DE SALTA- FACULTAD DE HUMANIDADES

PROBLEMÁTICA DEL CONOCIMIENTO CIENTIFICO

ESP. MARTA ELIZABETH PEREZ Y LIC. RUBEN EMILIO CORREA

DOCUMENTO DE CATEDRA: KARL MARX

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      Marx nace en Tréveris, ciudad en la que realiza sus estudios primarios y secundarios, se traslada a Boon para estudiar derecho y luego a Berlín donde estudia Filosofía. En 1843 se casa con Jenny von Westphalen, de familia feudal prusiana y descendiente de una de las más antiguas familias escocesas.

      En Berlín frecuenta asiduamente un círculo de jóvenes hegelianos que asumieron posturas radicalizadas. Allí conoció a  Bruno Bauer. Se licenció en Filosofía en 1841 con una tesis titulada Diferencia entre la filosofía de la naturaleza de Demócrito y Epicuro. Una vez licenciado en Filosofía, quiso obtener algún cargo docente en Bonn, pero no pudo ingresar puesto que Bauer quien lo iba a ayudar fue alejado de la universidad. Posteriormente comienza su carrera en periodismo siendo redactor de la Gaceta renana, órgano de difusión de los radicales burgueses de Renania, donde también escribía Bruno Bauer, pronto será nombrado redactor en jefe del periódico. En el verano de 1843 escribe Crítica al derecho público de Hegel, cuya introducción se publica en Paris en 1884. Se traslada a París donde entra en contacto con       Proudhon y Banc, y conoce a Friedrich Engels que será amigo y colaborador durante toda su vida.

       Con la ayuda de algunos amigos prosigue sus investigaciones en filosofía y política, mientras tanto colabora con el periódico Adelante de artesanos comunistas que también se difundía en Alemania, esta publicación provocará su expulsión de Francia en 1845 y se traslada a Bélgica hasta 1848. A lo largo de esta época iba madurando su apartamiento de la izquierda hegeliana, en 1849 se traslada a Inglaterra, estableciéndose en Londres y en 1864 logra fundar la Asociación Internacional de Trabajadores (Primera Internacional) que fue disuelta en 1872. Fallece en 1883, un año después de la muerte de su esposa.

      Entre sus obras más importantes, podemos mencionar en 1844 Manuscritos económicos- políticos, en 1845 La sagrada Familia- con Engels-; en 1845 La ideología Alemana -con Engels-, en 1845  Tesis sobre Feuerbach, en 1847 Miserias de la Filosofía, 1848  El manifiesto comunista -con Engels-, en 1859 Contribución a la crítica de la economía política, en 1867 El capital, en 1884 El origen de la familia,  La propiedad privada y el estado- con Engels-, en 1892 Del socialismo utópico al socialismo científico.

Algunos tópicos de sus obras

       El pensamiento de Marx se configura en contacto y oposición a la filosofía de Hegel, las ideas de la izquierda hegeliana, las obras de los economistas clásicos y las de los socialistas a los que califica de utópicos. Marx hace evidente su posición en contra de Hegel, discute la idea que las instituciones jurídicas y  políticas así como las distintas formas de Estado puedan explicarse en virtud del autoproclamado desarrollo del espíritu humano. En contraposición a Hegel sostiene que las instituciones jurídico-políticas son consecuencia de  las condiciones materiales de vida. Considera que Hegel interpreta el mundo de un modo invertido, piensa que instituciones sociales como  por ejemplo, el mayorazgo procede de una necesidad racional y de este modo legitima el orden existente. Lo que hace en definitiva es transformar en “verdad filosófica” lo que no son más que hechos históricos.

       En el Manifiesto comunista Marx y Engels plantean que existen diferencias entre el socialismo científico y los otros tipos de socialismos. En especial hace referencia al socialismo de Sismondi que implica una visión conservadora y reaccionaria que ataca la burguesía amenazada en convertirse en proletariado y al socialismo alemán de Bauer y Hess, que constituyó el “complemento dulzón de los amargos latigazos con que los gobiernos respondían a las insurrecciones obreras”. También somete a crítica el socialismo de Proudhon caracterizado como socialismo burgués que quiere mejorar la situación de la clase obrera mediante la beneficencia, o el moralismo.  

       En las Tesis sobre Feuerbach Marx dice que su labor  termina siendo la disolución del mundo religioso en su base profana, asimilando la esencia religiosa a la esencia humana. Está de acuerdo con Feuerbach en su humanismo materialista, sin embargo sostiene que se detuvo ante el problema principal: entender porque el hombre crea la  religión. Los hombres alienan su ser proyectándolo en un Dios imaginario, por lo tanto, hay que cambiar las condiciones de vida que permiten que surjan y prosperen las “quimeras religiosas” puesto que el sentimiento religioso es un producto social.

        Es el hombre quien crea la religión, pero el hombre es el mundo del hombre, el Estado, la sociedad. Este Estado, esta sociedad producen la religión que es una conciencia invertida del mundo, porque también ellos son un mundo invertido. Existe un mundo fantástico de los dioses, porque existe el mundo irracional e injusto de los hombres. La miseria religiosa, es la expresión de la miseria real, es el anhelo de la criatura oprimida, el opio de los pueblos.

       Los filósofos, dice Marx, se limitaron a interpretar el mundo de diversas maneras, ahora se trata de transformarlo. Por lo tanto, la crítica a la religión es la crítica del derecho, la crítica de la teología es la crítica de la política.

      Por otro lado,  sostiene que la falla fundamental de Feuerbach reside en que sólo capta la cosa, la realidad, lo sensible bajo la forma de objeto o de contemplación y no como una actividad humana,  como práctica. De allí que el lado activo fuera desarrollado de modo abstracto. Feuerbach concibe a los objetos sensibles como distintos a los conceptuales, pero no concibe la actividad humana misma como una actividad objetiva.

      Marx ve al objeto en su movimiento, en su devenir y no como objeto estático que pueda ser explicado descubriendo la causa física del mismo. Estudia al hombre y la historia partiendo del hombre real, de las condiciones económicas y sociales bajo las cuales tiene que vivir y no primordialmente de sus ideas.

       En Manuscritos económicos- filosóficos, se plantea como problema central la existencia del individuo real cuya naturaleza se desarrolla y revela en la historia. Para algunos autores como Fromm (1973:17) los Manuscritos constituye su principal obra filosófica “…donde se expone  su concepción del hombre, de la enajenación, la emancipación, etc….”^[1] 

         En ésta obra, Marx  sostiene que totalmente al reverso de lo que sucede en la filosofía alemana, no se puede partir de lo que los hombres dicen, se representan o imaginan, ni tampoco del hombre predicado, pensado, representado o imaginado, para llegar al hombre de carne y hueso, sino que “se parte del hombre que realmente actúa y arrancado de su proceso de vida real se expone también el desarrollo de los reflejos ideológicos y de los ecos de este proceso de vida”^[2] Ahora bien, el modo en que los hombres producen sus medios depende de la naturaleza de los medios de vida con que se encuentran y tratan de reproducir. La reproducción no refiere solo a la existencia física de los individuos, es más bien un determinado modo de actividad de esos individuos, un determinado modo de manifestar su vida. Tal como los individuos manifiestan su vida, así son. Lo que los individuos son, dependen de las condiciones materiales de producción. 

       Para Marx el hombre hace su propia historia, es su propio creador. El factor más importante de éste proceso de creación está en su relación con la naturaleza. El hombre en principio de su historia está ciegamente atado o encadenado a la naturaleza, en el proceso de evolución transforma su relación con la naturaleza y por lo tanto se transforma a sí mismo. La forma del proceso social de vida o el proceso material de producción logra despojarse de su lado místico cuando comienza a ser obra de los hombres libremente socializados. Para ello, la sociedad necesita contar con una base material o con una serie de condiciones materiales de existencia que son fruto de una larga evolución. (Fromm, 1973:28)

        En Contribución a la crítica de la economía política, Marx explicita dos conceptos fundamentales de su teoría; el trabajo y el cambio histórico. Un componente  fundamental  en la mediación entre el hombre y la naturaleza es el trabajo, que es la expresión de la vida humana. A través del trabajo se modifica la relación del hombre con la naturaleza, y el hombre se modifica a sí mismo. El cambio se debe a la contradicción entre las fuerzas de producción  y la organización social existente. Cuando un modo de producción obstaculiza en vez de favorecer  a las fuerzas dadas de producción, la sociedad -si no quiere morir- escogerá aquellas formas de producción que corresponden a la nueva serie de fuerzas productivas y las desarrollará. Dice Marx:

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