La teoria de las ideas. Disertación existencia

Desde el principio de los tiempos, las personas han buscado algo en lo que apoyarse a la hora de vivir. El tema de la disertación remite al hombre, ese ser “peculiar” que habita en la tierra.

Algunos se apoyaban en la necesidad de o bien creer que algo superior al hombre (Dios) determinaba la diferencia entre el bien y el mal y justificaba las acciones del hombre o por otra parte, la de ser demostradas por algunos hombres las explicaciones de los misterios de la naturaleza y de sus conocimientos (La evolución).

Cada persona es un mundo y tiene formas únicas de percibir e interpretar la realidad y la vida, por eso cada uno busca su sentido y la razón de su existencia.

Hay tantas razones para dar sentido a tu vida que sería imposible nombrarlas todas, lo importante es tener una, porque sin una razón por la que existir, la vida pierde totalmente el sentido; el secreto está en buscar una propia, sin dejarse influir por opiniones exteriores.

Uno de los grandes pasos que todos deberíamos dar es el de asumir que algún día llegará nuestra hora, para darnos cuenta de lo importante que es nuestra vida y no malgastarla ya que, al fin y al cabo, estamos condenados a convertirnos en un  recuerdo y según nos hayamos comportado podemos ser recordados de una forma u otra.

Una de mis razones que da sentido a mi vida es la familia, ya que son aquellas personas que lo han dado todo y han seguido adelante por mi sin pedir nada a cambio y así el día de mañana poder ser algo y sentirme cómoda conmigo misma.

Pienso que todos tenemos una misión común que consiste en facilitar a los demás su existencia y así que aumenten las ganas y razones para vivir.

Hoy en día reconocemos que nuestro conocimiento es limitado y probablemente siempre será así y nunca llegue a explicarse todo, por eso en mi opinión pienso que cada cual es libre de apoyarse, creer y ser como quiera, ya que al fin y al cabo es su vida y esa persona es la única que tiene derecho a elegir, con el fin de sentirse cómoda consigo misma.

Acabo esta disertación con una frase del filósofo Nietzsche: “Quien tiene un porqué para vivir, encontrará casi siempre el cómo”.

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