NEOPOSITIVISMO
Olhivero1 de Julio de 2013
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Neopositivismo o Positivismo Lógico
Con este nombre se designa a la posición filosófica del Círculo de Viena y a la filosofía científica que de él se deriva.
El Círculo fue fundado en el año 1929 por Moriz Schlick junto a un grupo de científicos, matemáticos y filósofos, entre los que se encontraban Philipp Frank, Herbert Feigl, Hans Hahn, Otto Neurath entre otros. Se creó un grupo de discusión en torno a problemas epistemológicos y cuya pretensión era seguir el camino abierto por el positivismo en muchos de cuyos puntos fundamentales estaban de acuerdo: la defensa del empirismo, el rechazo rotundo de la metafísica y una orientación unificadora de la ciencia en sus lenguajes y en sus métodos.
Anunciaban el final de la filosofía tradicional. Llamaban filosofía tradicional a la filosofía sistemática que se enseñaba en las universidades alemanas, al idealismo alemán, y a la filosofía de Kant.
Se sentían fundadores de una nueva era: la de la concepción científica del mundo, en el cual la filosofía, habiendo renunciado a su pretensión de reina de todas las ciencias, se convertiría en el auxiliar necesario del trabajo científico. Muchos integrantes del Círculo propusieron abandonar el término filosofía para referirse al nuevo pensamiento, y así diferenciarse de los sistemas metafísicos. Sostenían que ellos lograrían construir una filosofía que estuviese a la altura de la ciencia contemporánea.
Consideraron a Russell y a Wittgenstein como representantes eminentes de la concepción científica del mundo, aunque ninguno de ellos fue miembro del Círculo.
Russell, planteó que la lógica matemática es la que va a procurar los métodos y será el instrumental necesario para la transformación del pensamiento para brindar una visión científica del mundo. Russell construye la lógica sobre bases enteramente matemáticas.
Ludwing Wittgenstein, en su obra el Tractatus Logico-Phisophicus, realiza un análisis lógico del lenguaje. Considera que las proposiciones atómicas son el elemento último para este análisis. La proposición atómica describe un hecho, expresa que una cosa tiene una determinada cualidad. Estas no son divisibles en otras proposiciones y se corresponde con hechos atómicos. Se trata de la entidad lingüística elemental, de la cual se puede predicar la verdad o la falsedad. Las proposiciones moleculares se constituyen a partir de la atómicas relacionándolas con conectivas, lo cual hace que en su valor de verdad dependan de las proposiciones atómicas que las componen. La posibilidad de reducir una teoría de enunciados atómicos es lo que permitirá su verificación.
Wittgenstein había denunciado que la mayoría de las cuestiones filosóficas, sobre todo las referentes a la metafísica, carecían de sentido si se las examinaba a la luz de un análisis lingüístico. Este postulado fue completamente asumido por la mayoría de los neopositivistas. Moritz Schlick, aceptó identificar la metafísica con una perversión del lenguaje. Si se parte de la base de que todo conocimiento corresponde a dos tipos de juicio: las cuestiones de hecho, que versan sobre acontecimientos existentes y que son conocidos a través de la experiencia, y las cuestiones de sentido, que son reflexiones y análisis sobre el sentido que damos a los hechos (es decir, se trata de cuestiones meramente lingüísticas que se sustraen a la cuestión de la existencia y que nada pueden decidir sobre ella). La metafísica entonces queda circunscrita a una esfera de imperfección.
El desprecio hacia la metafísica sirvió para excluir de toda investigación científica todo hecho extralingüístico y para depurar a la filosofía de multitud de pseudo problemas.
Los neopositivistas sólo aceptan como dotadas de significado las proposiciones analíticas (a priori), que no se refieren a nada real y son propias de la lógica y la
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