Tema de La filosofía del trabajo del hombre contemporaneo

INTRODUCCIÓN

En el siguiente ensayo se expondrá el tema del Hombre de la era actual, pero con un enfoque en el trabajo que este individuo realiza. También se planteará el proceso que conlleva ese trabajo a tal grado de convertirse en un trabajo enajenante, lo cual está intrínsecamente relacionado con el mundo histórico, en el que el hombre ha vivido a lo largo de la historia, en este caso el actual. Primeramente, se hablará del inicio del hombre como individuo, esto por medio del principio de Nirvana, seguido por los instintos primarios (Eros y Tánatos), después a grandes rasgos, escasez, mundo histórico, trabajo, enajenación, el mundo flotante y, para finalizar, la libertad. Sin embargo, el propósito de este escrito es mostrar cómo a partir de una serie de represiones florece lo que hoy conocemos como el hombre, pero también la forma en que se libera, o lo que se concibe como liberación, de ese ser reprimido que la sociedad ha procreado.

EL TRABAJO DEL HOMBRE CONTEMPORÁNEO

El hombre civilizado es reprimido desde la niñez, ya que los padres ejercen represión para educarlo, pero el individuo está en la busca constante de la felicidad, sin saber que no hay tal cosa, siempre hay una mezcla de dolor y placer; el principio de nirvana es algo más allá del placer, es decir, el mundo de la plenitud total y contrario a la realidad, por eso es que el hombre siempre busca retornar a ese estado, sim embargo antes de profundizar en tal tema, primero debemos esclarecer los términos Id y Ego (principio de placer y principio de la realidad)

El aparato metal está constituido por el Id, Ego y Superego. El Id es la base del aparato mental, ya que son los instintos primarios, los cuales luchan por la satisfacción de las necesidades instintivas, o sea el principio del placer. El Ego se manifiesta, ya que es el mediador del Id con la realidad adaptándose a ella. En esa instancia, se puede decir que el principio del placer es sustituido por el principio de realidad.

Ahora bien, si el hombre se dejara guiar por el placer, lo libidinoso o Id, entonces actuaría como un animal dejándose llevar por sus instintos, mas tarde o temprano el principio de realidad le presentaría una escasez en los alimentos por lo que tendría que salir a trabajar y luchar por su existencia. Pero siempre con el recuerdo de la gratificación del trabajo.

 El trabajo es la autoexpresión del hombre individual, se desarrolla, se vuelve él mismo. Éste no sólo es un medio para lograr un fin, el producto, sino un fin en sí. Pero el trabajo coetáneo se realiza por la satisfacción de cosas materiales, debido a que la represión ya no es la misma que se experimentaba e la niñez sino ahora es una represión excedente. El mismo individuo genera una represión en su persona para poder cumplir con su trabajo (el superego), se castiga a sí mismo o lo que es lo mismo, el placer es suspendido y el dolor prevalece. Cree que entre mayor sea su jornada laboral mayor será la gratificación de bienes materiales. En la historia de la civilización la represión básica y la represión excedente han estado inextricablemente entrelazadas, pero en el mundo histórico del siglo XXI, aparece el trabajo productivo, donde sólo existe la represión excedente, el cual es enajenante porque aleja a la persona de sí misma, el hombre no se realiza, no se experimenta a sí mismo y lo conduce al vacío.  

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