ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La Catedral


Enviado por   •  3 de Febrero de 2014  •  925 Palabras (4 Páginas)  •  250 Visitas

Página 1 de 4

Así se expresa uno de los más grandes artistas de nuestra época: Rodin. Es que la armonía es el principio fundamental de toda arquitectura, así sea en las obras más arcaicas y primitivas, como en las más modernas y audaces.

Las dos grandes torres son como atalayas que vigilan los contornos del edificio. La nave central parece destinada a los escogidos. En las naves procesionales los fieles se acurrucan en muchedumbre. El altar de los Reyes preserva un sitio al gobernante que debe representar a Dios en la tierra. El crucero sirve de desahogo al interior y, en el centro, la cúpula vuela como una imagen anticipada de la gloria eterna.

Para el arte de las colonias españolas de América, la construcción de las grandes catedrales significa la máxima altura a que podía llegar el esfuerzo arquitectónico de cada país, a, la vez que la expresión del criterio artístico más ortodoxo, más apegado a las formas europeas. La primera gran catedral de América, la de Santo Domingo, fue comenzada en 1515 por el arquitecto Alonso Rodríguez, maestro mayor que había sido de la catedral de Sevilla.

La Catedral de México resume en si misma todo el arte de la Colonia. Su construcción tardó casi tres siglos, de manera que en ella se compendian todos los estilos, desde las bóvedas ojivales de sus primeros tiempos, el severo herreriano de sus portadas del lado del norte, de las de la sala capitular y la sacristía, hasta el neoclásico de Ortiz de Castro y el Luis XVI de Tolsá, pasando por el barroco de las demás portadas y el churrigueresco coruscante del altar de los Reyes. Acontece en ella lo mismo que en sus grandes hermanas españolas cada época le imprime un tono en el estilo que impera.

Desde el punto de vista social, la historia de la Catedral de México nos enseña cómo las grandes creaciones son obra en este país del esfuerzo personal, a la inversa de las viejas catedrales europeas. La Catedral de México debe su existencia a determinadas personas: los arzobispos que se dieron cuenta de la necesidad de la obra y la solicitaron con toda energía; los reyes de España que ordenaron su construcción; los virreyes que pusieron en obedecer el mismo entusiasmo que en crear y los artífices que levantaron el edificio muchas veces con su propia sangre.

Naturalmente, la edificación exigió enormes cantidades de indios y no siempre se les trató con la justicia debida. Los frailes, siempre protectores de sus neófitos, elevaron más de una ocasión su protesta contra la obra. Puede haber habido en el fondo cierta rivalidad hacia una iglesia que tal vez juzgaban innecesaria, puesto que ellos tenían numerosas iglesias conventuales, pero no debe dejar de mencionarse el hecho para justicia de unos como para desdoro de otros.

Naturalmente, la edificación exigió enormes cantidades de indios y no siempre se les trató con la justicia debida. Los

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (5.7 Kb)  
Leer 3 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com