ANTONIETA

Producción económica: encuentros y desencuentros desde la perspectiva de la administración.

Congreso de investigación del Departamento de Producción Económica. UAM-X. Noviembre 8 al 11 del 2010.

Martha Margarita Fernández Ruvalcaba .

RESUMEN

Con la mirada que produce el transcurrir del tiempo y un asomo a la dimensión epistemológica desde la formación en Administración que la autora tiene, se revisitan los proyectos que se han realizado en una universidad pública ubicada en la Ciudad de México. Tales proyectos desafiaban el paradigma disciplinario apostándole a la interdisciplina en la educación superior de pre-grado, lo que la convirtió en pionera en América Latina al diseñar un sistema de enseñanza-aprendizaje en el que los planes y programas de estudio no se elaboran con base en contenidos sino en problemas de la realidad socialmente relevantes y pertinentes en relación a un perfil de egreso.

El resultado de esta revisita son hipótesis respecto a los obstáculos que inhibieron el potencial de ese sistema educativo y el avance de la investigación en el conocimiento de problemas reales que por su naturaleza ignoran las fronteras disciplinarias. El partir de un objeto de investigación construido holísticamente en y por la interacción disciplinaria es la alternativa que se sugiere para definir a la Producción Económica como un subsistema de un sistema complejo, cuyo estudio estimula a que cada disciplina aporte desde su especificidad al conocimiento de ese todo.

INTRODUCCIÓN

Hace 35 años ingresé a la UAM- Xochimilco a un Departamento cuyo nombre siempre me había parecido a la vez interesante y curioso: “Producción Económica”. La explicación que me daba del mismo era que si los fundadores de la UAM-X habían decidido implantar un sistema de educación superior innovador, en el que la investigación científica no fuera un asunto exclusivo de los posgrados y de centros de investigación, sino que fuera el pilar mismo de la formación profesional (lo cual, en lo relativo a la licenciatura en Administración, demanda un perfil práctico); pues debieron elegir un nombre que fuera en si mismo diferente e innovador.

A mediados de los años 70’s del siglo XX paradojas o contradicciones como la de querer transformar bachilleres en personas con licencia oficial (título académico y cédula profesional otorgada por la Secretaría de Educación Pública) para resolver problemas de la realidad, en el caso de la administración, de empresas y organizaciones; y para ello recurrir a teorías y metodologías con carta de identidad de las torres de marfil en las que se alojan los académicos, encajaba muy bien en la lógica dialéctica, en aquél entonces con una presencia notable, que resolvía en una síntesis la oposición de los contrarios.

Mi hipótesis sobre esa situación y que pude formular explícitamente después de hojear la obra de Roldán García cuyo subtítulo es “Conceptos, métodos y fundamentación epistemológica de la investigación interdisciplinaria” , es que el autor del nombre que lleva nuestro departamento, intuitivamente nos estaba proponiendo el estudio de la producción económica como un sistema complejo. Raúl Livas Vera+ , primer jefe de departamento, y el grupo de académicos que invitó, también intuimos lo que Rolando García ahora plantea claramente: el estudio de un sistema complejo, cuyos elementos no son separables, requiere de un marco conceptual y metodológico en el que se concede particular importancia a las interacciones entre fenómenos que pertenecen a dominios diferentes (material y técnico-económico, individual, espiritual y psicológico, social y político) y que estudiar las interacciones entre los fenómenos que lo conforman, implica también propiciar las interacciones al interior del grupo de investigadores con formaciones disciplinarias diferentes con objeto de que adopten y en su caso construyan referentes teóricos y metodológicos comunes.

La “toma de distancia” que cada investigador debe realizar con respecto a los objetivos específicos de estudio de su disciplina particular, significa una apertura a métodos, conceptos y lenguajes a los que está poco habituado. Se trata, sobre todo, de una búsqueda constante desde cada área de estudio de los fenómenos específicos más poderosamente vinculados con las demás áreas, en la perspectiva de responder a incógnitas comunes que rebasan ampliamente los marcos de las disciplinas particulares, pero que, a su vez, son replanteados desde cada una de ellas. (R. García: 68).

Para ubicarnos, imaginemos una línea de tiempo e identifiquemos en ella los momentos en que el conocimiento estaba unificado en la filosofía y momentos en que la comunidad científica ha planteado que para avanzar, el todo debía ser desagregado en partes y cada una de ellas estudiarse por una disciplina particular. En dichos momentos las distintas disciplinas gradualmente ganaron autonomía, hasta que los enlaces inter-disciplinarios se desdibujaron junto con los grandes problemas comunes. En otros momentos, como el actual, han surgido iniciativas de articulación que han producido distintos tipos de ciencia unificada: la que es una integración o síntesis de carácter inductivo y otra que es más bien un intento de síntesis de formas de cultura y de ciencias. Se trata de integrar las ciencias naturales y las culturales, o las ciencias y las humanidades dentro de un “sistema”. Este puede fundarse en una teoría de sistemas similar a la desarrollada por Ervin Laszlo , en las que un punto distintivo es el intento de integrar valores dentro del cuerpo de concepciones científicas, como es el caso de la economía política o de la administración estratégica cuando incorpora la ética y responsabilidad social de las organizaciones como criterios de desempeño.

El camino por el cual se llega a estas interrelaciones no es arbitrario y supone la puesta en acción de un proceso que constituye uno de los mecanismos básicos de desarrollo cognitivo: el proceso de diferenciación de una totalidad dada y de integración (o reintegración) de una totalidad conceptualmente más enriquecida. El doble proceso de diferenciación e integración constituye el procedimiento metodológico para realizar un estudio interdisciplinario de un sistema complejo.

El contexto de las relaciones entre administración y economía.

Como ya lo señalamos, dicho contexto lo constituye un departamento académico de una universidad pública en México creada a mediados de1970 el cual agrupa especialistas

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