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1. ADMINISTRACIÓN PÚBLICA EN LAS CIVILIZACIONES ANTIGUAS MÁS IMPORTANTES DE ASIA, EUROPA Y AMÉRICA

1. China

China tuvo como principal organizador de la maquinaria del Estado a Chóu-Kung, a quien también se le atribuye la pa-ternidad del Chóuli, obra en la que se describe todo el organis¬mo estatal de la dinastía de Chóu.

Las funciones generales del Estado se ejercían a través de seis ministerios o departamentos gubernamentales, a cargo del Primer Ministro (tatasai) que poseía casi igual poder que el Emperador. Dichas dependencias eran las siguientes:

«El Mandarín del Cielo» (t'ién-kuan) que desempeñaba la función de un Primer Ministro y ejercía poder general sobre los demás departamentos o consejos. Su ministerio correspondía al «Consejo del Ministerio Civil», que cumplía funciones, entre otras, de inspectoría general y de fiscalización de los nombra-mientos de los funcionarios. Posteriormente se le denominó «Consejo de la Oficina Civil».

Bajo la jurisdicción y competencia del «Mandarín de Cielo» se encontraban los servicios gubernamentales del imperio, así como las actividades civiles y militares. Administraba los ingre-sos y egresos públicos.

La segunda de las divisiones administrativas era la de la en-señanza y estaba dirigida por el «Mandarín de la Tierra». La jurisdicción de este Mandarín se extendía a todas las relaciones de la vida, a las ocupaciones del pueblo, a su comercio, a sus obligaciones civiles, a sus deberes religiosos y a sus asuntos dé familia, etc. Cumplía funciones de Juez de Paz.

«El Mandarín de la Tierra» tenía bajo sus órdenes al Tsi-Kién o censor público; este se encargaba de instruir al Emperador y a

los hijos mayores de ios altos funcionarios, en Lodo aquello que era bueno y virtuoso; y, el pau-shi, funcionario que tenía el dere¬cho de reconvenir al mismo Emperador en caso que faltase a sus sagradas obligaciones. Actualmente se llama hu-pu («El Con¬sejo del Pueblo»).

«El Mandarín de Primavera», que estaba encargado de las ce-remonias, especialmente de las religiosas, cumplía funciones de asesoramiento. Fue una creación característica de la nación china.

El cuarto de los seis consejos, representado por el «Mandarín de Verano» correspondía al actual «Consejo de Guerra».

Los chinos, en aquella época, no tenían ejército permanen¬te, pero cuando necesitaban soldados para combatir, sofocar rebeliones o ayudar al Emperador, se alistaba siempre el nume¬ro necesario. «El Mandarín de Tierra» encargado del Consejo del Pueblo, hacía las levas, y sus subordinados ponían los reclu¬tas a las órdenes del Mandarín de Verano, que era como el Ge¬neral en Jefe del Imperio.

La quinta gran división gubernamental era la del Consejo de Justicia, presidida por el «Mandarín de Otoño», encargado de administrar justicia en los casos delictivos.

El Código Penal representaba un sistema lleno de detalles que pueden calificarse de humanos comparados con ouos siste-mas asiáticos. Establecía que antes de que se pudiera sentenciar a muerte a un criminal, había de observarse las más rígidas y minuciosas reglas. Apelaba primero a un consejo de altos fun-cionarios, luego a una comisión compuesta ele funcionarios de inferior categoría y por último y en definitiva al pueblo mismo, El soberano tenia el atributo del perdón.

Todos ¡os ciudadanos eran iguales ame la Ley, pero los miem-bros de la casa imperial y los funcionarios administrativos dis¬frutaban del privilegio de ser castigados en privado para que conservaran

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