BANCO DE MEXICO
karensandra122 de Noviembre de 2014
15.071 Palabras (61 Páginas)198 Visitas
BANCO DE MÉXICO
ANTECEDENTES
El Banco de México, que abrió sus puertas el 1 de septiembre de 1925, fue la consumación de una aspiración largamente acariciada por el país. Poco recordado es actualmente el hecho de que los antecedentes de esta Institución se remontan al menos hasta principios del siglo XIX. En fecha tan remota como 1822, durante el reinado de Agustín de Iturbide, la historia registra la presentación de un proyecto para crear una institución con la facultad para emitir billetes que se denominaría "Gran Banco del Imperio Mexicano".
A partir del 1º de abril del año 1994, esta institución obtuvo su autonomía por decreto publicado en el mes de noviembre del año de 1993, este acontecimiento vino a fortalecer su trabajo en materia de política económica y fiscal, permitiéndole tomar decisiones que hasta la fecha han sido de suma importancia para el desarrollo de México.
El Banco de México es el banco central del Estado Mexicano, constitucionalmente autónomo en sus funciones y administración, cuya finalidad es proveer a la economía del país de moneda nacional. En el desempeño de esta encomienda tiene como objetivo prioritario procurar la estabilidad del poder adquisitivo de dicha moneda. Adicionalmente, le corresponde promover el sano desarrollo del sistema financiero y propiciar el buen funcionamiento de los sistemas de pago.
Además de la emisión de moneda resaltan las funciones tales como: informar mes a mes (los días 10 y 25 de cada mes) sobre el control de la inflación, esto es importante resaltar, ya que cuando existe inflación, la volatilidad de los precios relativos reduce la eficacia del mercado como mecanismo para la asignación de los recursos y falsea el cálculo económico, inhibiendo la inversión. Asimismo, el crecimiento acelerado y desordenado de los precios propicia tasas de interés elevadas, por el premio que los ahorradores demandan para las inversiones financieras.
La autonomía del Banco Central es un buen dique contra la inflación en la medida en que no está dirigida a paliar sus síntomas, sino a evitar sus causas. Ello, porque está encaminada a impedir un uso abusivo del crédito del instituto emisor, fuente principal del mal.
A menos de un año del otorgamiento de su autonomía, el Banco de México tuvo que colaborar con la Secretaría de Hacienda en el enfrentamiento de las crisis de balanza de pagos y bancaria que se manifestaron durante los primeros meses de 1995. La crisis bancaria se resolvió principalmente mediante mecanismos fiscales. Sin embargo, el banco central coadyuvó a esa solución actuando preventivamente en su calidad de prestamista de última instancia. Por su parte, la crisis de balanza de pagos y las sucesivas devaluaciones que provocó a lo largo de 1995 dieron lugar a que tuviese que iniciarse de nueva cuenta un esfuerzo de estabilización en gran escala para erradicar la inflación en forma definitiva.
Un avance muy importante tuvo verificativo durante la época de la Segunda Guerra Mundial cuando se habilitó como instrumento de regulación monetaria la manipulación de la tasa de los depósitos de liquidez o encaje legal. Este fue el principal instrumento de regulación monetaria hasta que, durante la segunda mitad de los setenta, se crearon las condiciones para que el Banco de México pudiera practicar las llamadas operaciones de mercado abierto.
Desde la década de los cuarenta se había venido pensando en la conveniencia de desarrollar en México un mercado amplio de dinero. Ese proyecto no se convirtió en realidad hasta que en 1978 se creó el título de crédito gubernamental con el cual el banco central pudiese intervenir e influir sobre la liquidez disponible a través de la realización de compras y ventas. Así, como un antecedente de importancia, en 1975 se expidió la Ley del Mercado de Valores con base en la cual se formaron las instituciones para operar en ese mercado. Unos años más tarde, en 1978 las autoridades anunciaron la creación del Cete (Certificado de la Tesorería de la Federación) título con el cual podrían llevarse a cabo las operaciones para inyectar o absorber liquidez del sistema.
En esa tradición de evolución operativa se inscribe la adopción por el Banco de México del esquema de política monetaria denominado Objetivos de Inflación (OI). La principal aunque no la única virtud de dicho enfoque es que mediante su aplicación se ha buscado darle mayor eficacia a la política monetaria y minimizar los costos que implica la lucha contra la inflación. Otra manera de captar la esencia del esquema OI es que busca conseguir la credibilidad de los agentes económicos en la banca central y en la política monetaria. Contando con esa credibilidad, resulta mucho más fácil combatir a la inflación y conseguir que los beneficios de la estabilidad se difundan con mayor rapidez al funcionamiento de la economía en general. Todos los buenos resultados que en materia económica y regulación financiera, así como el manejo del buen funcionamiento del Sistema Financiero Mexicano, ha sido derivado de todo un marco jurídico que le ha dado sustento a esta gran institución, como lo es el Banco de México.
OBJETIVOS
o I. Operar con valores.
o II. Otorgar crédito al Gobierno Federal, a las instituciones de crédito, así como al organismo descentralizado denominado Instituto para la Protección al Ahorro Bancario;
o III. Otorgar crédito a las personas a que se refiere el numeral VI del apartado A anterior;
o IV. Constituir depósitos en instituciones de crédito o depositarias de valores, del país o del extranjero;
o V. Adquirir valores emitidos por organismos financieros internacionales o personas morales domiciliadas en el exterior, denominados en moneda extranjera, pagaderos fuera del territorio nacional, considerados de primer orden en los mercados internacionales;
o VI. Emitir bonos de regulación monetaria;
o VII. Recibir depósitos bancarios de dinero del Gobierno Federal, de entidades financieras del país y del exterior, de fideicomisos públicos de fomento económico y de los referidos en el numeral XI siguiente, de instituciones para el depósito de valores, así como de entidades de la administración pública federal cuando las leyes así lo dispongan;
o VIII. Recibir depósitos bancarios de dinero de las personas morales a que se refiere el numeral VI del apartado A anterior;
o IX. Obtener créditos de las personas morales a que se refiere el numeral VI del apartado A anterior y de entidades financieras del exterior, exclusivamente con propósitos de regulación cambiaria;
o X. Efectuar operaciones con divisas, oro y plata, incluyendo reportos;
o XI. Actuar como fiduciario cuando por ley se le asigne esa encomienda, o bien tratándose de fideicomisos cuyos fines coadyuven al desempeño de sus funciones o de los que el propio Banco constituya para cumplir obligaciones laborales a su cargo, y
o XII. Recibir depósitos de títulos o valores, en custodia o en administración, de las personas señaladas en los numerales VII y VIII del presente apartado. También podrá recibir depósitos de otros efectos del Gobierno Federal.
C. Adicionalmente, el Banco de México realiza el canje a la vista de los billetes y monedas metálicas que ponga en circulación, por otros de la misma o distinta denominación.
MISION
El Banco de México tiene el objetivo prioritario de preservar el valor de la moneda nacional a lo largo del tiempo y, de esta forma, contribuir a mejorar el bienestar económico de los mexicanos.
VISION
Ser una institución de excelencia merecedora de la confianza de la sociedad por lograr el cabal cumplimiento de su misión, por su actuación transparente, así como por su capacidad técnica y compromiso ético.
FUNCIONES
El Banco de México tiene encomendadas las funciones que se mencionan a continuación:
o I. Regular la emisión y circulación de la moneda, los cambios, la intermediación y los servicios financieros, así como los sistemas de pagos;
o II. Operar con las instituciones de crédito como banco de reserva y acreditante de última instancia;
o III. Prestar servicios de tesorería al Gobierno Federal y actuar como agente financiero del mismo;
o IV. Fungir como asesor del Gobierno Federal en materia económica y, particularmente, financiera;
o V. Participar en el Fondo Monetario Internacional y en otros organismos de cooperación financiera internacional o que agrupen a bancos centrales, y
o VI. Operar con los organismos a que se refiere el numeral V anterior, con bancos centrales y con otras personas morales extranjeras que ejerzan funciones de autoridad en materia financiera.
ANTECEDENTES DE LA MONEDA EN MEXICO
Durante los casi trescientos años del Virreinato de la Nueva España (1535-1821), la minería fue tan redituable que permitió a la Metrópoli acumular una gran riqueza en metales finos. El dinero de la época estuvo formado exclusivamente por monedas metálicas fabricadas en oro, plata y en menor grado, en cobre.
Aún durante el siglo XIX y las primeras décadas del siglo XX, las monedas metálicas se acuñaban en oro y plata. El valor nominal de las monedas equivalía al valor al que podía venderse el metal que contenían. Esto permitía que fueran aceptadas como medio de pago.
A diferencia de las monedas metálicas, se necesitaron muchos años y varios intentos para que los billetes fueran aceptados y utilizados como medio de pago en México. En un principio, fueron emitidos por
...