ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

BAYARD Y LA FOTOGRAFÍA COMO SIMULACRO


Enviado por   •  17 de Octubre de 2013  •  2.148 Palabras (9 Páginas)  •  376 Visitas

Página 1 de 9

BAYARD Y LA FOTOGRAFÍA

COMO SIMULACRO

H. Bayard, 1840, retrato desnudo

Hippolyte Bayard (20 de enero de 1801- 14 de mayo de 1887)

Gran inventor de la fotografía, al lado de Niepce, Daguerre, William Fox Talbot i Hèrcules Florence.

Fue empleado del ministerio de Finanzas en Francia y miembro de la Bohemia parisina, Bayard realizó imágenes fotográficas antes de que el daguerrotipo se hiciera público en 1839.

Él utilizaba un método propio al que llamaba dibujos fotogénicos, se caracterizaban per presentar un aspecto muy diferente de los daguerrotipos. Exponía a la luz un papel de cloruro de plata hasta que se volvía oscuro. Luego lo sumergía en una solución de yoduro de potasio y lo colocaba en la cámara. Así obtenía positivos directos. Presentan un mayor contraste entre blancos i negros, cuenta con menos detales, y una ausencia de grises. Sólo tienen en común con los daguerrotipos el tratarse de positivos directos, siendo entonces imágenes únicas.

Bayard trató que el gobierno francés subvencionara el su proyecto igual que había hecho con el daguerrotipo, pero su obra quedó totalmente olvidada cuando aparecieron las publicaciones sobre el daguerrotipo.

Además, François Aragó, el político implicado en el asunto del daguerrotipo, trató de ocultar sus investigaciones para no ensombrecer el papel de Daguerre. La única compensación que obtuvo fueron seiscientos francos, delante de las pensiones vitalicias concedidas a Daguerre y al hijo de Niepce.

Como fotógrafo se dedicó a la realización de bodegones, paisajes y retratos. Participó en la Misión Heliográfica y fue miembro fundador de la Sociedad Heliográfica y de la Sociedad Francesa de Fotografía. Gracias a sus trabajos se organizó la primera exposición fotográfica de la historia, para ayudar a las víctimas de un terremoto, en junio de 1839.

Con esta foto, el autor cuenta sus desgracias, en donde aparece como si estuviera muerto, y donde en el dorso de la fotografía escribió:

“El cuerpo que veis aquí es el de Monsieur Bayard… La Academia, el Rey y todos aquellos que han visto sus imágenes las han admirado, igual que vosotros. La admiración le repostó prestigio, pero no le dio ni un chavo. El Gobierno, que tanto dio a Daguerre, dijo que nada en absoluto podría hacer por Bayard, y el infortunado decidió ahogarse.”

Pero esto no era real, Bayard continuó viviendo, e hizo muchas más fotografías, en las que utilizaba tanto la técnica de Talbot y la de Daguerre.

En la imagen vemos un hombre que parece muerto, aparece desnudo, y está en una posición como si se quisiera recordar a esa persona y el hecho de su muerte. La fotografía es en blanco y negro, y debido al proceso con el que está realizada no tiene grises.

El sentido era retratar el suicidio de Bayard, aunque fuese de manera simulada, y algo que él hizo para representar su enfado por no conseguir algo que él quería.

Con esto nos demuestra que desde los principios de la fotografía se comenzaron a utilizar las herramientas para crear imágenes en las que se podían representar emociones o situaciones que no eran reales, sino que podían ser representativas de una emoción y no haber sucedido de verdad.

Cindy Sherman, 1981, sin título (autorretrato serie para su revista Artforum)

Cindy Sherman, es una cineasta y fotógrafa americana (nacida en Glen Ridge, New Jersey, en 1954 y que vive y trabaja actualmente en Nueva York) conocida por sus series de retratos conceptuales.

“Me siento anónima en mi trabajo. Cuando miro las fotografías nunca me veo; no son autorretratos. Hay veces que desaparezco”.

Con una infancia difícil, siendo la menor de cinco hermanos, por lo que siempre tuvo la sensación de sólo contar con ella misma. Su madre se dedicaba a enseñar a niños con problemas de aprendizaje, aunque, curiosamente, a ella nunca la animó a la lectura, mientras que su padre, en palabras de Sherman:

“Era un hombre odioso, egoísta y racista.”

Cuando era pequeña solía ir con su madre a las tiendas de saldos, donde adquiría varios artículos que acumulaba para ensamblar sus propias versiones de vestidos para bailes. Pero esto no era mal visto en su casa, de hecho a su familia le complacía que hubiera encontrado una manera de mantenerse ocupada. En una entrevista realizada por Simon Hattenstone para el diario The Guardian, al preguntarle si es que esa era una forma de escape, Sherman declaró:

“Era parte de eso, pero analizándolo psicológicamente era como decir “Si no te gusto de esta manera, ¿te gusto de ésta otra?” […] No significaba que no les gustara (a mi familia), sino que llegué muy tarde y ya eran una familia. Cuatro hijos, los padres, y yo fui la que llegó mucho tiempo después.”

Sherman se interesó en el arte en la Universidad del Estado de Búfalo, donde comenzó a pintar. Frustrada por las limitaciones del medio, se pasó a la fotografía.

“Estaba copiando meticulosamente el arte de otros y entonces me di cuenta de que, para hacer eso, podía utilizar una cámara fotográfica y emplear mi tiempo en las ideas.”

Así pasó el resto de su carrera de la universidad centrada en la fotografía. Barbara Jo Revelle, la introdujo al arte conceptual y a otras formas del arte contemporáneo.

El hecho de que Sherman haga parodias sobre el rol femenino en la historia le ha conseguido la etiqueta de feminista, como si enarbolara una bandera en protesta contra del sometimiento y la cosificación de la mujer.

“En mi proceso de desarrollo miraba a todas esas mujeres glamurosas con maquillaje y pechos puntiagudos. Me maquillaba todos los días porque pensaba “Nunca sabes quién va a tocar a la puerta.” Planchaba mi cabello aunque ya era liso. Después pasé por un periodo en el que dormía con grandes rulos, pero no habían rulos demasiado grandes, así que tomaba latas de jugo de naranja, incluso latas de jugo de tomate y enredaba mi cabello en ellas, y recuerdo cuando intentaba dormir con esas horribles cosas en mi cabeza.”

Después, en la universidad, tuvo que confrontarse a un nuevo cambio, a la liberación femenina, por lo que ya no utilizaba maquillaje ni rulos ni sostenes, aunque le gustaban. Debido a esto, la percepción de sí misma se vio desequilibrada, fue una confusión personal que muchas veces se ha interpretado como una crítica política. Al salir de la universidad Sherman solía salir disfrazada en un intento por ocultar su depresión, a lo que su pareja de ese entonces le sugirió que debería documentar el proceso, aunque ella pensaba que no estaba haciendo nada inusual. De esta manera Sherman

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (14 Kb)
Leer 8 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com