Costumbres funerarias pueblo Quitu
Pamela VásquezDocumentos de Investigación3 de Mayo de 2020
598 Palabras (3 Páginas)291 Visitas
El pueblo Quitu habitó durante el periodo comprendido entre 500 d.C y 1500 d.C, también conocido como el periodo de desarrollo regional e integración. Como menciona Holguer Jara, este pueblo se establecía en los valles y mesetas de lo que hoy consideramos como Quito, su territorio jugó un papel importante en su manera de interpretar y desarrollarse en el mundo, “La altura de las montañas para la divinidad, la meseta para los centros funerarios, el valle para la actividad cotidiana y la laguna para "lo escondido, el temor".
Sus costumbres funerarias estaban ligadas íntimamente con la divinidad, se creía que los fallecidos eran los portadores de la fertilidad, un vínculo entre los dioses y los vivos, específicamente la familia del fallecido; es por esta razón que se prestaba especial atención a los ritos funerarios, se celebraban ceremonias fúnebres, rituales y entierros en tumbas que cumplían con características especiales.
Las tumbas eran profundas, yendo desde los 10 hasta los 17 metros, divididas en tres niveles y de forma circular, esta forma cumplía con el propósito de representar la perfección, la vida, lo infinito, y la conexión entre la vida y la muerte. Los muertos eran posicionados en posición fetal, ya que de esta forma renacerían nuevamente en el vientre de la Pacha mama, así mismo se encargaban de proveer en la tumba de alimentos, agua y en algunos casos animales, para que los fallecidos puedan ingresar a su nueva vida.
A parte de las tumbas de forma circular también fue hallada una tumba en forma de trébol, representando la tripartición, o sea los tres mundos, el de arriba, el de aquí (mundo de los vivos) y el de abajo (el más allá).
También se halló que dentro de las tumbas los muertos se encontraban observando hacia el volcán Pichincha, que se cree era objeto de su veneración.
En la parte más profunda de las tumbas se podían encontrar a los miembros más importantes de la comunidad, quienes se encontraban usando vestimentas propias de su clase social, como los ajuares de Spondylus y diversas joyas; la élite también era enterrada sobre mesas. Estos ajuares se hallaron de dos colores distintos, morado para representar a la muerte y al hombre, y naranja y beige para representar a la vida y la mujer.
Se sabe también que los pobladores realizaban intercambios de molusco Spondylus Princeps, Calcifer, Madre Perla y Caracoles para la confección de trajes utilizados en ceremonias fúnebres.
Dentro de las tumbas se puede encontrar así también piezas de cerámica decorada con formas de aves, humanos y animales que representaban las creencias de este pueblo. Es importante recalcar que solo los miembros importantes eran enterrados con cerámicas que poseían decoraciones con diseños que representaban al difunto. También se han encontrado fragmentos de textiles bordados con imágenes de su vida diaria, metales, entre otras cosas.
Para la realización de las tumbas se comenzaba trazando un circulo en el lugar en donde se debía realizar la excavación, la que después se realizaba mediante un hacha de adentro hacia afuera. Una vez terminado el proceso de excavación se ingresaba al fallecido mediante escaleras de capulí o chonta, pero también era común el uso de sogas de cabuya o penco.
Gracias a los hallazgos encontrados dentro de estas tumbas podemos saber que los antiguos pobladores de Quito tenían una estatura menor a 1.55 metros, poseían ojos rasgados y pómulos prominentes, sabemos también que su expectativa de vida era hasta los 45 años y que las causas más frecuentes de muerte eran desnutrición, artritis, osteoporosis o las arduas actividades laborales que eran realizadas en condiciones ambientales adversas.
...