Culturas Prehispanicas
carloswyatt15 de Junio de 2015
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INSTITUTO POLITECNICO NACIONAL
FUNDAMENTOS DE ECONOMIA
CULTURAS PREHISPANICAS
VEGA ORDOÑEZ CARLOS
1CM3
´CULTURAS PREHISPANICAS DE MESOAMERICA
México fue el asentamiento de algunas de las civilizaciones más antiguas y desarrolladas del hemisferio occidental. Existe evidencia de que una población dedicada a la caza habitó el área hacia el año 21000 a.C. o incluso antes. La agricultura comenzó alrededor del año 5000 a.C.; entre los primeros cultivos estuvieron la calabaza, el maíz, el frijol y el chile. La primera civilización mesoamericana importante fue la de los olmecas, quienes tuvieron su época de florecimiento entre el 1500 y el 600 a.C. La cultura maya, de acuerdo con la investigación arqueológica, alcanzó su mayor desarrollo al acercarse el siglo VI. Otro grupo, los guerreros toltecas, emigraron desde el norte y en el siglo X establecieron un imperio en el valle de México. Fueron los fundadores de las ciudades de Tula y Tulancingo (al norte de la actual ciudad de México) y desarrollaron una gran civilización todavía evidente por las ruinas de magníficos edificios y monumentos.
Cultura olmeca
El antiguo pueblo de los olmecas del sur del golfo de México originó la más antigua civilización en Mesoamérica (México y América Central), y cuyo esplendor se fecha desde aproximadamente el 1500 hasta el 900 a.C. Su área central ocupó unos 18.000 km2, en las pantanosas selvas de las cuencas ribereñas de los actuales estados mexicanos de Veracruz y Tabasco. Su influencia se extendió gradualmente hasta las tierras altas de México, esto es, el valle de México, conocido como el Anahuác, y los actuales estados de Oaxaca y Guerrero, por lo que influyeron en otras culturas posteriores como la mixteca y zapoteca. Los olmecas iniciaron su andadura, durante el denominado período olmeca I (1500-1200 a.C.), con pequeñas aldeas costeras que practicaban una agricultura incipiente y mantenían el importante aporte de la caza y la recolección. El período olmeca II (1200-400 a.C.) comprende San Lorenzo, su centro más antiguo conocido, que fue destruido en torno al año 900 a.C. y sustituido por La Venta, una ciudad creada según un patrón axial que influyó en el desarrollo urbanístico de América Central durante siglos. Una pirámide de tierra apisonada de 30 m de altura, una de las más antiguas de Mesoamérica, estaba situada en el centro de un complejo de templos y patios abiertos. El período olmeca III (400-100 a.C.) se caracteriza por su marcada decadencia, ubicado en los centros de Tres Zapotes y Cerro de las Mesas y que reflejan ya las influencias de las culturas de Teotihuacán y maya, que comenzaron su expansión en los primeros siglos de la era cristiana.
Los olmecas, cuyo nombre significa ‘país del hule’ (del azteca ulli, hule o caucho), fueron los primeros en emplear la piedra en la arquitectura y escultura, a pesar de tener que extraerla de los montes de Tuxtla, a 97 km al este de Tula. Sus obras escultóricas incluyen tanto las colosales cabezas masculinas de basalto de 2,7 m de altura y 25 toneladas de peso como pequeñas estatuillas de jade que pueden observarse, junto a otros productos olmecas, en la ciudad mexicana de Villahermosa. Su sistema de escritura fue el precursor de los jeroglíficos mayas, y es probable que el famoso calendario maya se haya originado en la cultura olmeca. La civilización olmeca dejó establecidos patrones de cultura que influyeron en sus sucesores en los siglos venideros; por ello está considerada como la cultura ‘madre’ más importante de México.
La cultura olmeca es el nombre de la civilización que se desarrolló durante el Período Preclásico Medio. Aunque se han encontrado vestigios de su presencia en amplias zonas de esta área cultural, se considera que el área nuclear olmeca —o zona metropolitana— abarca la parte sureste del estado de Veracruz y el oeste de Tabasco. Se desconoce, a cabalidad, la filiación étnica —esto es, quiénes son los antepasados de este pueblo—; sin embargo, hay numerosas conjeturas que han intentado resolver el problema de la identidad de los olmecas. En ese sentido, es necesario hacer la aclaración de que el etnónimoolmeca les fue impuesto por los arqueólogos del siglo XX, y no debe ser confundido con el de los olmeca-xicalancas, que fueron un grupo que floreció en el Epiclásico en sitios del centro de México, como Cacaxtla.
Durante mucho tiempo se consideró que la olmeca era la cultura madrede la civilización mesoamericana.1 Sin embargo, no está claro el proceso que dio origen al estilo artístico identificado con esta sociedad, ni hasta qué punto los rasgos culturales que se revelan en la evidencia arqueológica son creación de los olmecas del área nuclear. Se sabe, por ejemplo, que algunos de los atributos propiamente olmecas pudiesen haber aparecido, primero en Chiapas o en los Valles Centrales de Oaxaca. Entre otras dudas que están pendientes de respuesta definitiva, está la cuestión de los numerosos sitios asociados a esta cultura en la Depresión del Balsas (centro de Guerrero). Sea cual haya sido el origen de la cultura olmeca, la red de intercambios comerciales entre distintas zonas de Mesoamérica contribuyó a la difusión de muchos elementos culturales que son identificados con la cultura olmeca, incluidos el culto a las montañas y a las cuevas; el culto a la Serpiente Emplumada, como deidad asociada a la agricultura, el simbolismo religioso del jade e, incluso, el propio estilo artístico, que fue reelaborado intensamente en los siglos posteriores a la declinación de los principales centros de esta sociedad.
Área de asentamiento olmeca
Con todo y que la cultura olmeca tuvo una difusión que alcanzó la mayor parte de Mesoamérica —excepto en la región de Occidente, que siguió un desarrollo cultural más o menos autónomo hasta finales del Preclásico—, una de las regiones donde se han encontrado las evidencias más claras de la presencia de esta cultura es la parte sur de la Llanura Costera del Golfo de México, comprendida entre los ríos Papaloapan y Grijalva, que corresponde a la mitad norte del Istmo de Tehuantepec. Actualmente, esta zona corresponde al sureste del estado de Veracruz y el poniente de Tabasco. Se trata de una zona de un clima cálido y muy húmedo, condiciones climatológicas que seguramente poseyó también en la antigüedad precolombina.
En verde los estados del asentamiento olmeca.
El área nuclear olmeca es irrigada por caudalosos ríos que bajan de las estribaciones de la Sierra Madre de Oaxaca y la Sierra Madre Oriental, como el Coatzacoalcos, San Juan y Tonalá. Debido a la humedad de la zona y de las fuentes de estos ríos, en temporada de lluvias los desbordamientos de las corrientes son una constante. Aunque en la actualidad la vegetación de esta región de la República Mexicana ha sido ampliamente modificada por la acción del hombre, antiguamente estuvo recubierta por una espesa selva tropical, que era el hábitat de numerosas especies que en la actualidad se encuentran a punto de desaparecer en el territorio mexicano, entre ellas el jaguar, las aves de plumajes preciosos como guacamayas y quetzales; reptiles de diversas especies, y mamíferos como el tapir.
La región posee suelos ricos en humus y de espesores considerables. El petróleo crudo brota a flor de suelo entre la vegetación. Sin embargo, carece de muchos de los materiales que son característicos de los objetos de estilo olmeca encontrados en esta zona y en otras partes de Mesoamérica. Entre ellos se incluye la obsidiana, el jade, la serpentina y el cinabrio. Para obtener piedra sólida para sus materiales, los habitantes de esta región recurrieron a las canteras de la Sierra de los Tuxtlas —conocida también como sierra de Santa Martha o de San Andrés—, que les proveyeron de basalto y otras rocas volcánicas que emplearon en la construcción y en la escultura. Sin embargo, estas fuentes de materiales
pétreos se encuentran a más de cien kilómetros de distancia respecto a sitios como San Lorenzo y La Venta, lo que puede dar una idea del nivel de organización que se requirió para trasladar —sin animales de carga y sobre un suelo cenagoso— esos monolitos que se pesan en decenas de toneladas, hasta los centros políticos de la cultura olmeca.
Cabeza olmeca, en el Museo Nacional de Antropología.
La palabra "olmeca" significa "habitantes de la región del hule" y fue utilizada por los aztecas para nombrar a varios pueblos, étnica y lingüísticamente diversos, que ocuparon la región de Veracruz y Tabasco a través de los siglos. El nombre que se daban a sí mismos a quienes llamamos olmecas se desconoce. Esta cultura duró siete siglos y medio y pertenece al horizonte preclásico (2 500 a. de N.E. a 200 d. de N.E.) del pasado mesoamericano.
Bajo el término "olmeca" han sido agrupadas dos realidades: un pueblo de la región del Golfo y un estilo artístico. El estilo olmeca puede verse plasmado en peñas, cuevas, esculturas grandes y chicas y objetos de barro que se encuentran diseminados por todo Mesoamérica. De Jalisco a Costa Rica, pasando por Guerrero, Chiapas, Oaxaca, el Altiplano Central y la costa del Golfo, se han encontrado imágenes de niños-jaguares y otros rasgos propios del arte olmeca. Se cree que la dispersión de este estilo artístico se debe a que los pueblos del Golfo crearon una amplia red de intercambios con otras poblaciones lejanas. De este modo, los símbolos y formas olmecas se integraron a las expresiones artísticas de otras zonas mesoamericanas.
Asimismo, se le llama olmeca a la "cultura
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