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El Comunismo


Enviado por   •  15 de Abril de 2015  •  1.697 Palabras (7 Páginas)  •  223 Visitas

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El Comunismo: ¿Estímulo ante el Capitalismo Burgués, Desarrollo Político-Económico o Pensamiento Utópico?

El hecho de abordar el polémico tema del Comunismo en este brevísimo ensayo no es algo innovador, puesto que ya raya en lo trillado explicar este fenómeno político. Y no es para menos: Es el Sistema Político, junto al Liberalismo, que concentra más seguidores a nivel mundial, y que ha dado un viraje brusco a la Historia del Siglo XIX en adelante. Es tanto el antagonismo, que encabezan el denominado espectro político: Izquierda (Comunismo, Marxismo, Socialismo…) y Derecha (Liberalismo, Capitalismo, Imperialismo…). En la izquierda prevalece el colectivo o la propiedad común, mientras que en su polo opuesto el individuo es el centro de todas las doctrinas.

El Comunismo es la corriente de pensamiento político más criticado en los últimos tiempos. Y es que, según sus inexorables principios filosófico-teóricos, esta ideología es totalmente irrealizable. La cuestión radica en las fallidas concepciones generadas por su creador porque, según aseveró mi profesor de Historia de la Cultura Occidental, el padre del Comunismo declaró que Rusia era el peor lugar para que se diera este modelo, principalmente por su organización feudal y su atraso tecnológico en el siglo XIX, no obstante producirse la Revolución Bolchevique en 1917; en su defecto, propuso como ejemplo Inglaterra, lugar donde jamás se dio ni se ha dado la tan esperada Revolución.

El Comunismo encuentra sus orígenes en la Antigua Grecia, no tanto como doctrina sino como noción; una especie de prototipo. Entre sus defensores destaca Platón quien, en La República “(…) propone la comunización de todos los bienes, inclusive las mujeres.” (Montenegro, 2012). Siempre surgió como una respuesta a todas las injusticias padecidas por las clases más desprotegidas, pero faltaba darle cuerpo a esa idea. Y para esto tuvo que esperar hasta 1848, fecha en la cual Karl Marx (considerado el padre de esta corriente política) y Friedrich Engels redactaron el Manifiesto Comunista. En él, los dos filósofos declaran la necesidad de cambiar el orden mundial imperante, producto de la Revolución Industrial y los estragos que causó en los distintos órdenes.

Lo que ocurrió durante “El Maquinismo” fue una conquista irracional de territorios (como los que hizo Inglaterra con África) en búsqueda de materias primas; la desmesurada explotación en las fábricas no sólo de hombres, sino de mujeres y niños que “(…) desde su más tierna edad, deben trabajar y son aniquilados por la mala alimentación, la falta de unidad del hogar, el peso del trabajo en la fábrica, la corrupción derivada de la miseria y otras calamidades semejantes.”(Ibídem); Y, finalmente, el surgimiento de dos clases sociales: La Burguesía, que había sustituido a los nobles de sangre (Ibídem), pequeño grupo de personas propietarios de las máquinas, fábricas, lujos, bienes y posesiones; y el proletariado, que era la clase obrera de las fábricas oprimida por la Burguesía. Definitivamente, el comunismo surgió como una salvación heroica a la postre del capitalismo burgués.

Bajo este ambiente, Marx encontró a aquel grupo bajo el cual fundamentaría su mayor obra: El Proletariado. Karl establece que la única solución a la problemática es invertir los roles, de manera tal que la prole gobierne y la burguesía sea gobernada. El filósofo alemán denomina a este suceso como “La Dictadura del Proletariado”. Para que se produzca esto debe usurparse el poder mediante una Revolución, donde todo el estrato social bajo tome las calles y use las armas para deponer de manera violenta a la burguesía. La Revolución, por supuesto, va en contravención de la Evolución; que contempla un ascenso al gobierno pacífico y se produzcan cambios graduales.

Luego de esto, se instaura la referida Dictadura del Proletariado, donde se elimina la empresa privada, se someten a los rebeldes y el Estado monopoliza los tres sectores de la economía: Primario (La tierra, las minas…), secundario (el transformador, donde radican las fábricas) y terciario (la comercialización del producto). Ya superados estos y otros requerimientos, se llega al propio comunismo: Un lugar donde ni el Estado ni las leyes son necesarias, no existe clases sociales sino una sola, y donde los bienes son de dominio público. Cabe destacar que Marx no era adepto a la Clase Media, puesto que esta tendía a anexionarse a la Burguesía (Ibídem). Esto es lógico, porque ¿a quién no le gustaría progresar económicamente? ¿Es malo eso?

Posterior a la publicación del Manifiesto Comunista, se fueron creando los distintos frentes comunistas por país; es decir, sedes del partido político. La primera la fundó Marx en Inglaterra, pero luego se crearon centros en Francia y Moscú. Para que se pudiera gestar una Revolución Comunista se tuvo que esperar hasta principios del Siglo XX. En efecto, aprovechando la conmoción que padecía el planeta entero durante la Primera Guerra Mundial, Lenin propició en Rusia una lucha armada que terminó con el ascenso al poder de los comunistas. Por supuesto, esto al costo de deponer y aniquilar al zar ruso y a toda su familia, además de gestar una guerra civil que dejó millones de muertos. Los líderes para el momento fueron el ya mencionado Lenin, hábil orador con gran poder de convencimiento, y Leon Trotsky, que era el intelectual del movimiento (Ibídem).

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