Globalización

EL EMPRENDEDURISMO E INFORMALIDAD

Cuando se habla de Emprendedurismo, se habla del comportamiento del emprendedor, de una forma de ser y de vivir, y esto abarca entre otras cosas, tener iniciativa, aceptar el riesgo; organizarse buscando el bienestar, con vocación al logro, con herramientas como la creatividad, confianza en sí mismo y motivación.

Según el autor Antonio César Amaru, la persona que asume el riesgo de iniciar una empresa es un emprendedor.

Lastimosamente, El Emprendedurismo ha traído consigo la informalidad; actualmente, el Perú se encuentra en el 6to lugar de economía más informal en el mundo, esto es producido debido a los elevados costos de la formalidad, tanto para el acceso como para la permanencia.

Los emprendedores se caracterizan por su positivismo en la concreción de una idea y con solo esto es suficiente para avanzar hacia derroteros más complejos, solo basta la iniciativa para tener la seguridad plena de que sus ambiciones podrán un día ser reales, como reales serán sus resultados en términos de crecimiento económico, desarrollo social , estabilidad política y democratización económica. No podemos ignorar que existen factores externos –como las condiciones del mercado- y factores internos –como los temores al riesgo- que de distintas maneras podrían limitar a los emprendedores, pero solamente saltando al agua se aprende a nadar. El riesgo es y será siempre una constante en el proceso de formación y consolidación de una empresa, por ello, únicamente quien arriesga podrá experimentar el Emprendedurismo empresarial.

Se define al emprendedor como una persona con decisión e iniciativa para realizar acciones y asumir riesgos financieros.

Una de las acciones fundamentales para renovar o estudiar al emprendedor es ideológica y está caracterizada por el uso abundante del optimismo. Además es también un fenómeno social y realista, científicamente hablando.

Dicho término, no es un concepto de moda; según Francisco Durand, el término emprendedor, tal como se usa hoy, ‘es un vino viejo en una nueva botella’, los re-creadores del término no son los propios agentes económicos, sino más bien economistas o ideólogos que buscan promover y hacer conocer el emprendimiento económico. El emprendimiento en el Perú viene dándose desde la década de los 50, cuando los provincianos empezaron a migrar hacia la costa.

La pobreza y el Emprendedurismo, se relacionan directamente ya que sin emprendedores no hay inversión, sin inversión no hay empleo, no se genera riqueza, ni se mejoran las condiciones de vida de una población; pero por otro lado, mayor emprendedores es sinónimo de mayor pobreza; ya que esto indica que la gente pobre se tiene que inventar su propio trabajo, con poco capital, con baja productividad y competencia. Esta es otra razón por la cual casi siempre tienen que ser informales. El Emprendedurismo se reduce conforme los países aumentan la producción y se hacen más productivos y competitivos.

Un ejemplo claro de esto, es Gamarra; la cual constituye un prodigio de desarrollo, es el paraíso de la informalidad y el capitalismo popular; en dicho lugar se produce más riqueza y hay más transacciones comerciales que sin duda

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